La apuesta...

4.

Llegamos muy pronto a su casa, y de ahí yo seguiría hacia la casa de mis abuelos.

- Gracias por dejarme venir contigo, en realidad no queria venir sola.

- Gracias a ti, hiciste el camino un poco mas divertido, a como lo es usualmente. - si el tiene razón, por Dios soy muy divertida.

- Muy bien, entonces adiós...- dije dandome la vuelta.

- Si, adiós.- dice levantando la mano en señal de despedida.

Sigo mi camino a casa de mis abuelos pensando en lo que haré mañana en la tarde, ya que mañana es viernes, yeii!!, seguramente llame a Amanda para ir al centro comercial a cine o a comer tacos, me encantan.

Llegué pronto a la casa de mis abuelos, timbré y lo que era de esperarse mi abuela Letty salió a apretarmr mis mejillas, hace una semana no la veía ya que estaban de viaje, pero no era para tanto.

- Hola abue.- Dije tratando de vocalizar un poco, parecía un pollo.

- Hola mi niña bonita, por que tardaste tanto? - dijo mi hermosa abuelaapretamejillasdeldemonio.

- Es que venia caminando con Milles y nos estabamos poniendo al tanto de lo que ha pasado estos años y...- dije sobandome las mejillas y siendo interrumpida por mi abuela.

- Milles Larsen? - abrió los ojos como platos, pareciera que le fueran a echar gotas.

- Si, que pasa?

- Nada mi niña, solo que me sorprende que te hables de nuevo con él.

- A okey, iré a dejar mis cosas abue.- le dí un beso en la mejilla y fui hacia la habitación de huespedes.

Arrojé mi maleta a la cama y me tiré de panza, me volteé y quedé mirando al techo, y me puse a pensar cuál sería el siguiente paso para enamorar a Miles. La verdad es que aún me daba un poco de pesar, pero era más importante yo, obviamente.

Me dirigí hacia la cocina, me preparé un sandwich y me serví un poco de jugo de naranja. Fui de nuevo a la habitación y me puse a ver Once Upon a Time, esa serie me encanta. En esas sonó mi celular y era Amanda *maldita que siempre arruina todo*.

- Hola Emma, quería saber si quieres ir conmigo a ver una peli? , estoy aburrida. Por fa , por fa siii? - Supuse que estaba cara de perrito mojándose.

- No lo sé Amanda, mi abuelo trabajará todo el día y mi abuela se quedará sola, tu sabes cuanto odio que se quede sola. Porque mejor no vienes y preparamos brownies, como la vez pasada. - Amanda soltó una carcajada, igual que yo.

*Flashback*

- Amanda creo que les echaste mucho polvo para hornear...

- Claro que no, antes les faltó.

- Y además les pusiste mucho calor.

- No, así están bien, tú creeme. Ya he hecho esto antes. Y creo que ya están listos. - dijo cantando.

- Si tú lo dices...

Demoramos más abriendo el horno que los Brownies explotando en nuestras caras, haciendo que quedasemos llenas de chocolate. Por cierto estaban deliciosos.

*Fin del Flashback*

- Esta bien, ire. Pero recuerda que no somos muy buenas haciéndolos, y si hacemos desorden tu abuela nos obligará a limpiar y odio limpiar.

- Muy bien, no te tocará limpiar.

Terminé la llamada y el timbre sonó.

Hola, hay alguien por aquí?
Lo siento por no haber subido capítulo en el horario que acordé. Pero miren los milagros existen, espero les guste este capítulo y no olviden dejar sus votos *si me pagaran por cada vez que digo eso ya sería millonaria*.
Bueno, los quiero y bye bye.