Predestined Love 𐦍 KookMin 「Omegaverse」

🌙 08: Marca Temporal.

La siguiente semana se pasó volando para el omega, había ido a clases, pero tampoco estaba prestando atención a ellas. Estaba nervioso y no podía evitarlo, extrañaba a Jungkook, su lobo aullaba porque quería ir hacia él, y él no podía simplemente cumplirselo. 

Hoseok seguía fuera y aunque le mandaba mensajes, él no tenía ni ganas de responder. Tampoco hablaba demasiado con Taehyung, sólo lo justo y lo necesario, aunque ese día el omega no dejaba de preguntarle cosas acerca de esos dos días que se perdió en la nada, y Jimin ya estaba comenzando fastidiarse del tema, así que finalmente después de un rato lo miró cansino.

—Tae, ¿recuerdas aquella clase que tuvimos acerca de los predestinados?

—Oh, él habla —dijo sarcásticamente, pero al ver a Jimin tan serio, asintió. —La recuerdo.

—Bueno, sabes que yo he tenido un mismo sueño por años, aunque estos días ha sido distinto, pero creo que ya sé porque fue.

—No te entiendo nada, háblame en español, Jimin, saque un cuatro en aritmética.

—Aritmética son matemáticas, Taehyung —rodó los ojos. —Hablo de que yo siempre soñaba con mi lobo huyendo de algo, y de pronto me encontraba con otro lobo, un alfa de aroma delicioso y al despertar aún podía olerlo, pero después sólo lo dejaba pasar.

»Hasta que de pronto hace unas semanas que discutí con mi madre por lo de papá y esto de la boda, por alguna razón conduje hacia donde me llevara la carretera y de pronto lo olí. El dueño de ese aroma es un alfa llamado Jeon Jungkook que vive al sur, él... Él es mi predestinado, pasé mi celo con él cuando me desaparecí.

Cuando terminó de hablar comenzó a ver hacia todas partes para descartar que alguien los estuviera oyendo, pero sólo estaban ellos dos sentados en las gradas de la universidad.

—¿Estás diciendo que encontraste a tu alfa y tuviste relaciones con él? —le preguntó con los ojos saltones. —Jimin, eso es asombroso...

—No lo es, sabes que Eunwoo me pedirá matrimonio pronto.

El omega pareció recordar eso y su sonrisa se borró.

—Bueno, pero ellos deben comprender que encontraste a tu alfa, eso no lo hace cualquiera, a mi me gusta tu hermano pero no creo que seamos predestinados.

Jimin suspiró y luego se levantó para ir a la maquina expendedora con su amigo siguiéndolo de cerca, sacó una bebida enlatada y le dio un trago, se sentía tan melancólico que no tenía ánimos siquiera para ocultarlo.

—No lo entenderán, son negocios, Jungkook no tiene nada que pueda parecerle lo suficientemente atractivo a mi madre como para que yo me uniera a él, la empresa no se beneficiaría en nada.

—Pero tu... Ustedes, llegará el momento en el que no podrán estar lejos del otro, sino es que ya está aquí, no te lo quería decir porque creí que seguías afectado por lo de tu padre y el matrimonio, pero hueles a tristeza.

Jimin frunció las cejas, debía intentar recomponerse.

—Estaremos bien.

A Taehyung no pareció gustarle la respuesta, pero finalmente cuando el timbre sonó ambos volvieron a clases. Al final del día, se despidió de su mejor amigo y se fue hacia su automóvil. Condujo hacia su casa no queriendo llegar, pero pensando en que al llegar, después de la cena le marcaría a Jungkook para preguntarle como le había ido en el trabajo.

Pero ese buen pensamiento, justo se borro al entrar cuando de pronto el aroma a café inconfundible de Eunwoo lo hizo detenerse y ponerse rígido. Unos murmullos llegaron a sus oídos, el alfa parecía estar hablando con su madre en el interior de su despacho. Jimin tragó saliva sin saber si debía huir de ahí afuera o a su habitación, pero cuando estaba optando por la primera opción, las puertas del despacho se abrieron y ambos alfas lo miraron.