Capítulo 2: Enredados en las Palabras del Corazón.

1 1 0
                                    

En este segundo capítulo, nos sumergimos en las profundidades del vínculo que comenzó a florecer en la chispa inicial del encuentro. Aquí, las páginas se llenan con las tintas de las primeras conversaciones, los gestos tímidos y la apertura emocional que caracteriza el proceso de conocimiento mutuo.

Tan fácil que era saludarte, de pronto ya ni puedo mirarte. Los días pasaron como hojas en el viento, y el cambio se instaló entre nosotros de manera silenciosa pero perceptible. Antes, un simple "hola" desataba una maraña de emociones positivas, pero ahora, incluso el contacto visual se ha vuelto incómodo.

Las palabras que antes fluían con naturalidad ahora parecen quedar atrapadas en el aire, como si hubiera un abismo entre lo que sentíamos antes y lo que somos ahora. Quizás fue el tiempo, con su capacidad implacable para desgastar las cosas, o quizás fueron las circunstancias que nos llevaron por caminos diferentes.

Valentía ligada con mi cobardía, en mi corazón ya tienes una estadia, deseando que algún día vayamos en la misma vía, pero mientras tanto, lamentablemente, vamos en vía contraria. Esta dualidad interna, entre el deseo profundo y el miedo paralizante, se convierte en un conflicto constante, una lucha entre lo que anhelo y lo que temo.

Las palabras no pronunciadas pesan en mi pecho, como cadenas que impiden que la verdad salga a la luz. Quisiera encontrar la fuerza para romper esas cadenas, para expresar lo que late en mi interior, pero la cobardía se aferra a mí como una sombra persistente.

En mi mente, trazo escenarios de un futuro compartido, donde la valentía finalmente triunfa sobre la cobardía. Imagino un camino donde nuestras vidas convergen, donde nuestras vías se entrelazan en un destino común. Sin embargo, la realidad presente nos sitúa en rumbos opuestos, como dos trenes que pasan uno al lado del otro pero que no pueden converger.

La espera se convierte en un desafío, y la incertidumbre nubla la visión de lo que podría ser. Aunque mi corazón anhela la unión, la realidad a veces parece estar regida por fuerzas más allá de mi control. Surge la pregunta: ¿cómo superar la barrera de la cobardía y permitir que la valentía guíe mis pasos?

Quizás el primer paso sea confrontar mis propios miedos, explorar las razones detrás de esta cobardía arraigada. En la reflexión, encontraré la llave para liberar mi valentía, abrir las puertas que me separan de la posibilidad de compartir contigo el mismo camino.

Quizás nos perdimos en el laberinto de expectativas no cumplidas o nos dejamos atrapar por la rutina que empañó nuestra conexión. A veces, el tiempo no solo agrega capas a una relación, sino que también puede erosionarla si no la cuidamos con atención y cariño.

Mientras tanto, la esperanza persiste, y aunque las vías nos lleven en direcciones opuestas en este momento, el destino siempre puede sorprendernos. La vida es un constante fluir, y quizás, con el tiempo, nuestras vías se encuentren nuevamente en un cruce donde la valentía finalmente tome el timón y nos guíe hacia un destino compartido.

Las palabras se convierten en las herramientas que tallan los contornos de la relación, delineando la narrativa única que está tomando forma. En este escenario, las conversaciones evolucionan más allá de las trivialidades superficiales, adentrándose en el terreno fértil de las experiencias compartidas, las risas compartidas y las reflexiones más íntimas.

Este capítulo es un viaje hacia la autenticidad, donde las máscaras se desvanecen gradualmente, dejando espacio para la revelación genuina de las personalidades. Desde las narraciones cotidianas hasta los relatos más profundos, las palabras se convierten en los ladrillos que construyen los cimientos de una conexión más significativa.

10 etapas de estar enamoradosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora