Capítulo 16

218 26 2
                                    


Eunha

Afuera ya estaba oscureciendo y me encontraba acostada en mi cama viendo hacia la nada. En todo este tiempo no pude parar de pensar en la práctica de anoche contra TAT, si es que se le puede llamar así. Para mí fue más como una masacre. Me sentí...me siento, frustrada, enojada, triste y decepcionada conmigo misma.

No ayudó en mi situación que el vídeo del partido de anoche se haya publicado en Weibo. Por supuesto, no faltaron los malos comentarios, y sí, los leí. Para ser honesta, fue una muy mala idea y como era de esperarse, la mayoría era criticándome. Pedían que me fuera y que Lu Yue regresara, otros (para mi sorpresa), querían a Smiling .

Tal vez deberían hacer eso... Tal vez sea lo mejor.

-No, no vayas por ahí otra vez.

Hay un suave golpe en la puerta, lo ignoro. Mi teléfono vuelve a vibrar por millonésima vez en el día y lo ignoro. Los únicos mensajes que he respondido son los de mi mamá, que al ver que no respondía a sus llamadas acudió a ese método de comunicación. Su primer mensaje había sido para decirme que leyó lo que pasó en Weibo y que no me preocupara.

Si tan sólo fuese así de fácil.

Me había planteado no responderle pero sabía que si no lo hacía era capaz de venir hasta la base y era lo último que quería. Así que, después de responderle con un ''Estoy bien'', siguió insistiendo, mandándome vídeos ''divertidos'' o contarme algún chisme de la oficina, según ella para mantener mi mente ocupada con otra cosa,. Pero para ser honesta, no le hacía mucho caso, sólo obtenía como respuestas stickers de mi parte.

No me mal entiendan, amo a mi mamá, tal vez en otra ocasión habría visto todo con atención, respondiendo con mil caritas y comentado al respecto, pero hoy no. Hoy no tenía el ánimo para eso.

Vuelven a tocar la puerta. Me acurruco más en mi cama. Tarde o temprano se van a ir. Sin embargo, alguien gira la manija de la puerta y la abre. Se me olvidó el seguro.

Esperando que una figura de hombre, posiblemente el de Rui, atravesará la puerta, me sorprendo al ver que se trataba de Tong Yao. De todas las personas en esta base era la que menos pensaba que iba a atravesar esa puerta.

- Vamos, no has salido en todo el día - No me levanto - Jinyang nos está esperando.

- No quiero salir - le digo sin ganas.

- Si no te levantas por voluntad propia, te levanto yo - toma mi brazo y hala. No logrando hacer mucho. Lo intenta varias veces hasta que me doy por vencida y me levanto fastidiada.

- Te dije que no quiero ir a ningún lado.

- Y yo te dije que vamos a salir – me mira fijamente con desafío – o prefieres que suba Rui y te de un sermón.

Sopeso un poco mis dos opciones. ¿Rui o Salir? Si me hacen levantarme de mi cama que sea para algo mejor que una de las charlas de Rui.

- Está bien – digo con derrota - Voy a vestirme, espérame abajo.

- No lo creo - Se sienta en el banco que está bajo la ventana - Te espero aquí. No quiero que al salir cierres la puerta con llave y no salgas del cuarto - la miró fijamente.

- No iba a hacer eso 

Eleva una ceja. ¿Crees que nací ayer?, decía su mirada. 

Atrapada.

Yao apunta a mi closet.

Resoplo. No sé para donde me llevará así que elijo algo parecido a lo que ella usa, unos pantalones altos pescadores y anchos junto a una camiseta negra.

Losing into the Galaxy 2.0 | Lu SichengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora