La Gran Serpiente Y El Hada.

Los Hongos. [Cap 10]

Mientras caminaba, en el aire se podía oler algo maravilloso era realmente delicioso.

Pensaba que había una aldea más serca de ese lugar, así que siguió caminando, la tarde ya había llegado pensaba buscar la aldea para refugiarse ahí, pero caminaba y caminaba y no vio nada pero el olor cada vez se hacia más fuerte.

Una pequeña luz salía de un arbusto, un resplandor azul, ella se acercó lentamente para observar lo que había ahí, al abrir el arbusto estaban unos pequeños hongos azules, los observo por un largo tiempo, sacó de sus cosas un cuchillo y corto uno, lo metió en un pequeño cofre y lo guardo, siguió caminando como si no paso nada.

La noche ya habia llegado en los alrededores de los valles, así que decidió hacer nuevamente un campamento en el lugar que estaba, comenzó a hacer el campamento, se tardo un poco más ya que oscuro y no podía observar mucho, su pequeña luz le ayudó un poco hasta que lo terminó.

Aloe fue el primero en entrar a la tienda, Cleo hizo una fogata y cocino un poco de sopa, ya que tenía hambre, le dio un poco de pescado a el zorro y los dos comieron a gusto.

La noche se sintió muy tranquila y en paz el cielo se miraba realmente hermoso la luna tenía un brillo único junto a las estrellas, al terminar de comer espero unos momentos para entrar a la tienda ya que estaba realmente cansada.

La noche estaba pasando poco a poco, la tranquilidad de la noche hizo que Cleo durmiera como una niña....

A la mañana siguiente.

Cleo se despertó muy relajada, la noche que paso durmió muy bien, ese lugar le transmitía calma y paz, Cleo estaba encantada con ese valle, le dio nuevamente pescado a Aloe y ella comió un durazno, antes de salir de la tienda.

Cleo salió primero de la tienda a recoger todas sus cosas de anoche, después salió Aloe, fue a dar una pequeña caminata sin alejarse mucho.

Cleo volví a deshacer la tienda y volvio a guardarla en sus cosas.

-Aloe, ven tenemos que irnos.

Grito Cleo, el zorro obedeció fue donde ella, antes de irse de ese lugar vio como Frunte se acercaba donde estaba ella, se sorprendió mucho ya que se le hacia extraño verlo ahí.

El se acercó, ella disimulo para que no supiera que ya lo había visto, siguió guardando unas pequeñas cosas.

El llegó hasta donde ella estaba y la observo de pies a cabeza y ella lo miraba con curiosidad, pensó que podría estar haciendo el tan lejos de el bosque oscuro o de su hogar.