Entre sombras y destinos

Capítulo 1

"Una vez, puede ser coincidencia, pero ¿Cuatro?"

Pov. Simon

Una copa de champaña y un pequeño aperitivo, eso era lo que sostenían mis manos mientras veía mi programa favorito en la computadora, caso cerrado; no sabia cual era mi obsesión con el programa o el gusto excesivo con este, pero me enecanta verlo a cada rato, es casi como... Un gusto particular cuando no tengo nada que hacer y quiero entretenerme con algo, claro, que era realmente por tiempos, ya que, después tendría otra obsesión más, como la tuve con mentes criminales, como dice el dicho, la rosa de guadalupe o con los caquitos, buen programa de chespirito, el cual me consumió un buen tiempo.

Seguía metido en mi mente hasta que un grito me hizo salir de mi cabeza para tocar un poco la realidad cuando alguien choco conmigo, haciéndome tirar la copa encima mia y ensuciando mi bella polera, solté un bufido mientras le veía correr junto a otras personas mientras algunos gritaban "Incendio, corran, salgan por la puerta." - ¿Como si pudieran... Espera, ¡¿Qué?! - Mire hacia atrás y vi que todos los asientos traseros se estaban quemando, trate de levantarme, pero no podía, era como si algo me lo impidiera o mi propio cuerpo no me dejaba; seguía intentando levantarme de mi asiento, pero cada esfuerzo era inutil, no podía hacerlo por más que quería y mis fuerzas se agotaban con cada intento. Mi corazón estaba acelerado, mi presión bajaba, mi respiración aumentaba hasta ponerme a jadear mientras la ansiedad me inundaba con el miedo de que iba a morir. Podía sentir el calor acercarse a mi cuerpo, haciendome sudar, cerré mis ojos tratando de pensar en mi madre, sabía que ella iba sufrir si moría y no quería eso, por eso seguía tratando de salir de allí, pero por mas que intentaba, no podía, incluso, quise gritar, pero la voz tampoco me salia o no me escuchaban; veía como todos se iban y que el incendio se acercaba. Cerré mis ojos con fuerza esperando lo peor hasta que, mi cuerpo comenzó a moverse como si alguien lo estuviera zarandeando con mucha fuerza.

- Chico, despierta, hey, despierta - Abrí mis ojos de golpe, dándome cuenta de que había sido un sueño, tan solo un sueño, pero un sueño que casi me da un infarto. Mire al lado mio, donde estaba una mujer acariciando su melena rubia mientras suspiraba aliviada - Vaya susto me has pegado, chico.

- Disculpa - Musite acomodando me en mi asiento mientras veía a una azafata venir con una cubeta que parecia contener hielo. Levante una de mis cejas mirándole, y esta solo se detuvo riendo para luego irse.

- Fui yo que le dije que lo trajera - Volví a mirar a la chica con cara de estupefacción mientras ella solo reía - Es que no querias despertar y ya estabas preocupándonos.

- ¿Para qué querían despertarme? No es que me quería quedar en esa pesadilla de incendio - Comente riendo un poco, a lo que la chica me miró raro mientras yo negaba restándole importancia.

- Porque ya estamos llegando, y como me dijiste que te avisara - Dijo la chica con un poco de pena, a lo que yo solo pude soltar una leve risilla, recordando que le habia pedido que me despertara cuando hubieramos llegado.

Le agradeci soltando un suspiro de mis labios mientras desviaba mi mirada a la ventanilla que estaba cerca de mi asiento, donde mire las nubes, empezando a recordar la forma en la que había llegado hasta ese vuelo rumbo a Londres, específicamente, a Canterbury por una oferta de trabajo que me ofrecieron cuando estaba dando mi pasantia medica en una clínica de mi ciudad natal; estaba muy emocionado con la oferta, y tarde mucho para dar una respuesta, consulté con mi madre y todo, pero el miedo de irme de mi ciudad me invadió y termine declinando la oferta, para luego verme apurado solicitando la otra vez - Aun lo recuerdo como si fuera ayer...

⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤⏤

FLASHBACK