Miraba por la ventana como el cielo se comenzaba a nublar. Últimamente solo había días nublados. Las gotas comenzaron a caer por su ventana.
La puerta fue tocada llamando su atención. Al dar la orden, sólo miró de reojo a la mucama.
- mi señor, la señora..- dijo angustiada.
No era necesario escuchar más, ya se imaginaba lo que estaba pasando. Con su bastón camino directamente hacia la habitación. Detrás le seguía la mucama.
Ni siquiera había llegado a la habitación y ya comenzaba escuchar como algo se rompía. Así que avanzó su andar lo más rápido que podía.
Al llegar abrió la puerta y su corazón se estrujo al ver la escena que pasaba frente de él.
- la señora de repente se levantó y comenzó a llorar y gritar- aviso la mucama, mientras se llevaba las manos a su boca sorprendida.
-que nadie se acerque- ordenó.
La mucama sólo asintió y salió de aquella habitación.
Al ver que no sería interrumpido, suspiro y avanzó hacia la mujer que yacía en el suelo con el vidrio roto en su mano y con un poco de sangre en aquel camisón.
-kagome- llamo intentando llamar su atención.
Al ver que no funcionaba, se arrodilló hacia donde estaba.
-kagome- llamo nuevamente.
Al ver que ella estaba fuera de si, agarró suavemente su rostro y vio sus ojos tan opacos, sin vida.
Se mordió el labio inferior al verla así, con lo que pudo intentó sacar el vidrio que estaba en sus manos.
Con su poder intento curar las herida que tenía.
-debes dejar de hacerte daño- más que un regaño, suplicaba para que no lo volviera hacerlo.
Con la poca estabilidad que tenía, intento llevarla a la cama.
Al recostarla la tapo con las mantas y llevó su mano a la frente de ella.
-descansa- dijo al emanar un poco de su poder.
Cuando vio que ella cerró los ojos, suspiro un poco aliviado. Agarró uno de los mechones de cabello de ella y vio que al igual que sus ojos ya no deslubraba como antes.
Ya no sabía cuantas veces ella había hecho lo mismo.
Beso su frente y espero que por esa noche no tuviera pesadillas.
Salió de aquella habitación y órdeno a los sirvientes que limpiaran la habitación.
------
Se despertó abruptamente al ver que kagome comenzó a retorcerce en la cama, al ver sus mejillas sonrojadas y su respiración irregular. Sabía que algo andaba mal.
No espero para llamar a ningún sirviente y lleno el tazón con agua fria y con toalla exprimio. Lo llevo a la frente de ella y trato de regular la fiebre. Sabía que su poder no ayudaría en estos casos y por eso aprendió hacer estas cosas.
Cuando vio que se reguló un poco llamo al mayordomo.
-Jaken, trae al medico-
El mayordomo sólo acato órdenes.
No se espero mucho para que llegara el doctor.
El doctor reverencio y se acerco a la señora. Y comenzó a examinarla.
-mi señor lo que me temía ya comenzo- se limito a decir. - la señora sólo le queda poco tiempo.
El Sabía que ese terrible diagnóstico tarde o temprano iba a llegar.
ESTÁS LEYENDO
Una Oportunidad
Fanfiction-los villanos no nacen se hacen- dijo aquella niña con cabellos azabache curiosa por lo que acababa de leer - ¿que opinas sesh? El albino sólo medito la respuesta que diría. -es cierto, los villanos no nacen porque si, la misma humanidad se encarga...