¿Cómo puedo dejarte ir si sigues aquí? Estás hasta en las cosas más insignificantes, una luz parpadeante, un ruido en la habitación, los pasos en el techo, un garrafón de agua que expulsa el aire cuando nadie se ha servido en un buen tiempo. Siempre espero cada señal tuya, siempre espero verte entrar por esa puerta, pero eso ya no es posible, estás aquí pero no está tu cuerpo, ¿Cómo estoy segura de que eres tú? No tengo pruebas, pero estoy segura. Siempre respondes a mis preguntas de diferentes maneras, cuando menos lo espero me hablas y solo yo puedo entender lo que dices, no me refiero a que escucho tu voz y las palabras pero he llegado a un punto en el que he aprendido a escucharte sin necesidad de que digas algo, cuando necesitas algo solo me lo dices con un sonido o una luz, también cree un sistema para hablar contigo en cualquier momento, se que me respondes ya que lo haces con claridad. Hay veces en que te siento lejos pero realmente estas cerca. Desearía volver a verte y abrazarte solo por un momento si es posible, pero no puedo, solo puedo verte y abrazarte en mis sueños. Aveces estoy tan metida en mis problemas que no pienso en nada más que en la pregunta¿Que hago? De un momento a otro la imagen de tu rostro viene a mi mente y encuentro solución, me haces entender que siempre estás conmigo. Tu sabes cuánto te quiero, cuánto te extraño, las veces que he llorado en silencio por tí para que nadie lo note, tu sabes cuántas veces me he guardado mis sentimientos y llanto hasta el punto en el que me duele el pecho y me quiebro tras cerrar la puerta de mi habitación solo tú eres testigo de cuánto te extraño. Te vi en mis sueños y pude abrazarte y escucharte reír una vez más, me sentía como cuando era niña, cuando ibas a verme y todo el día estabas conmigo, pero mi mente me recordó que tú ya no estás y el sentimiento de haberte perdido me invade otra vez, pero ¿Cómo era posible si estaba viendo tu rostro? pero despierto y ya no estás. Siento tu presencia en todos lados y se que ahí estás pero no te veo, solo se que en algún momento te podré volver a ver y te contaré todo lo que pasó mientras no estabas, volveremos a reír y jugar juntos, y volveremos a ser felices como cuando aún estabas aquí, y quizás, solo quizás ese día en que partiste yo no llore hasta el cansancio toda la noche, tal vez no me perdí en mi mente durante el día siguiente, tal vez no estuve a punto de desintegrarme mientras iban bajando tu caja, no llore toda la misa , tal. Vez no me enoje con la familia porque mientras yo estába destrozada ellos reían por las anécdotas que compartían de hace mucho tiempo, te fuiste y mi vida cambió, sentí como todo me dio la vuelta, no voy a mentir es difícil vivir sin ti.
ESTÁS LEYENDO
Mis Pequeños Relatos Del Corazón
Short StoryAlgunas Experiencias De La Vida Convertidas En Relatos Para Dejar Ir Las Situaciones