Me despertaron unos ruidos pero esta vez no era mi padre, eran una mezcla entre la dulce voz de mi hermana y un pitido que emitian unas maquinas a las que estaba conectado por cables y mas cables.
Cuando me desperte lo primero que quise ver fue a mi hermana. Cuando la vi me entro un remolino en el estomago que no podia con el. Mi hermana estaba llena de cicatrices y tenia un ojo morado, enseguida quise levantarme de un salto, pero si de tan solo abrir los ojos me dolia, mejor no moverse por un rato.
Cuando mi hermana se dio cuenta de que ya habia despertado se sobresalto y vino corriendo.
-¡Menos mal que estas bien!- cuando acabo la frase iba a decirme algo mas pero no pudo porque aparecieron 5 enfermeras y la sacaron de la habitacion.
Tras hacerme unas 20 pruebas ya me dejaron. Y cuando me levante un poco, pude ver un pie escallolado.
Cuando entro mi hermana le pregunte que habia pasado
-Has tenido un accidente cuando patinabas- Me dijo asustada.
Cuando se dio cuenta de que le vi lo que le habia pasado, se tapo un poco con el pelo.
-¿Ha sido el verdad?- Desde que agacho la cabeza supe que habia sido el cabron de mi padre.
-Dejame ver- Le dije apartandole un poco el pelo con mi mano.
-No es nada- Me dijo con una voz temblorosa.
-Vale, pero esto no se va a quedar asi-Dije enfadado.
Mire un poco a la mesita que tenia al lado y vi mi movil, con la pantalla rotisima, lo cojí y aun funcionaba asi que me puse en todas las redes sociales que tenia. Y despues de leer unos 500 mensages de amigos y de gente preguntandome que tal estaba, me volvi a dormir. Por la noche me desperte de un sobresalto y pense en el taller y en quien le daria el dinero a mi hermana para comer.
Y en el coche de mama, que queria acabar de arreglarlo antes de su cumpleaños pero ahora ya si que no podria hacer nada. Asi que intente dormir otra vez. Cuando desperte al dia siguiente vi a mi hermana hablando con una chica que me resultaba un poco conocida.
¡ERA MARTA!
Cuando me vio se le abrieron los ojos y vino hacia mi, mi hermana salio de la habitacion y nos dejo solos.
Vi que marta traia con ella una pequeña caja blanca.
-Hola Jake- me dijo sonriendo timidamente.
-Ho-Hola Marta- Dije como siempre tartamudeando.
-Te traigo una cosita- Me dijo
Abrio la cajita blanca y traia un par de batidos y unos 10 donuts.
-Es lo que a ti te gusta, ¿no?- me dijo un poco asustada.
-Si muchas gracias- le dije.
Estubimos comiendonos los donuts y bebiendonos los batidos.
Cuando acabamos nos quedamos mirandonos y mis pulsaciones se aceleraron. Y por culpa de una de todas las maquinas a las que estaba conectado, que empezo a pitar, se me notaron los nervios, y ella se rio y yo me sonroje.
Se iba acercando poco a poco a mi y cada vez nuestros labios estaban mas cerca y, cuando estabamos tan cerca que podia oir sus pulsaciones, entraron unas enfermeras diciendo que me tenian que poner una bacuna.
-Bueno yo me tengo que ir o mi padre se enfadara, nos vemos mañana, ¿vale?-
-Vale hasta mañana-
Las enfermeras me pusieron la bacuna y cada vez tenia mas sueño y se me iban cerrando los ojos hasta que mi visibilidad fue nula.