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Y caí al suelo, eso es lo último que recuerdo.
Ahora mismo no sé dónde me encuentro, solo escucho a lo lejos pitidos de una máquina, también voces que siento que se quejan y un dolor inmenso detrás de mi cabeza. Siento cómo mis brazos arden al igual que mi abdomen, como si me hubiera cortado profundo o algo parecido.
No sé que había pasado, primero estábamos shikamaru y yo luchando contra unos malditos que querían robar pergaminos secretos sobre la alianza shinobi, los cuales están en konoha, y de repente estoy en algo parecido a un hospital, creo yo.
Intenté abrir mis ojos, cuando pude hacerlo, ardieron como el mismísimo infierno. Empecé a analizar dónde estaba, era algo parecido a una habitación totalmente blanca, me sentía como en las nubes, intenté sentarme, me mareé al hacerlo. Si era una habitación blanca, ¿dónde mierda estaba?, pensé.
Me puse de pie, fijé mi vista en alguien que está al frente de mí, digo alguien porque no identificaba quién era.
- Un gusto conocerte temari -
- ¿Quién eres? - tome distancia
- Soy algo parecido a heridas no cerradas - también tomo distancia - y ahora que estás al borde de la muerte es mi misión aparecer
- ¿Estoy muriendo? - soné desesperada.
- Si, bueno, no del todo - al ver mi confusión prosiguió - Mientras tú y shikamaru defendían la torre del hokage, el delincuente que shikamaru estaba estrangulando con el poco chakra que le quedaba hizo que la pared que estaba detrás de ustedes les cayera encima - explicó muy tranquilo.
- ¿O sea que él está igual que yo? - asintió.
- Pero bueno, eso no es a lo que viene - comenzó a mover sus manos de forma extraña - viene a esto - chasqueó sus dedos
El desaparecido, el sitio quedó en total silencio
- Has crecido mucho temari
Sentí como mi cuerpo se quedó paralizado, gire con miedo para ver quién me hablo, esa voz era muy parecida a la de
- Mamá - mi voz se quebró
¡Temari entro en paro!
¡Sakura!¡Shikamaru también entro en paro!
Escuché a lo lejos pero lo ignore.
- Mi bebé - sonrió, sentí como mis ojos se humedecieron - mi niña, cuanto tiempo
Mi madre, la persona que murió cuando tenía tres años estaba frente a mí, sentí como mi pecho se estrujó con tal fuerza que mi corazón empezó a doler.
No puede evitarlo y corrí a abrazarla
- ¡Mamá! - la abracé lo más fuerte que pude - ¡Perdón! ¡Perdóname! - rogué con desesperación, sentí cómo las lágrimas caían por mis mejillas.
- ¿Por qué? - Ella me abrazó, pero a diferencia de mí ella estaba totalmente tranquila.
- ¡Debí hacerle caso a mi tío! ¡Debí ir a verte al consultorio! - mi respiración se agitó al recordar que no pude ver a mi madre cuando murió y eso era algo que nunca me perdoné y supere.
¡Uno, dos, tres!, ¡Recarga!, ¡Uno, dos, tres! ¡Vamos temari despierta!
- No te preocupes, eso ya no importa - me acaricio la espalda - Lo importante ahora es... Necesito que me hagas un favor - me tomo de las mejillas para ver mis ojos rojos y secar mis lágrimas, yo solo asentí.
- Primero necesito que te tranquilices hija, vas a entrar en un ataque de ansiedad, ¿Recuerdas que te daba a menudo cuando eras pequeña? - asentí de nuevo.
Sentí como mis ojos se me cristalizaron de nuevo
- Segundo, necesito que sobrevivas, recuerda que tienes que casarte temari, imagina cómo se va a poner ese muchacho si se entera de que moriste - sus ojos me transmitieron paz.
Shikamaru se cruzó por mi mente, él me daba la misma paz
- Pero, él está en la misma situación que yo
¡Sakura, shikamaru tampoco responde!
- Yo me encargo de él - me sonrió y vi cómo se iba desvaneciendo - Te amo mucho hija, no dudes de ti, por favor. Has hecho las cosas muy bien, no tienes nada de que arrepentirte.
- También te amo mamá - las lágrimas rodaban de nuevo por mis mejillas
- Cuida mucho a ese niño que llevas en tu vientre - termino de desvanecerse
Recordé ese pequeño detalle. Hace dos semanas le dije a shikamaru que estaba embarazada. Él insistió mucho en que no cumpliera con esta misión, y como siempre yo me puse de terca según él.
De repente sentí como si el alma me volviera al cuerpo.
¡Lo logramos! Ya está estabilizada
¿Shikamaru cómo está?Ya se encuentra bien, es raro, es como si fueran dos en uno
Jajaja sí, es hora de terminar con esto.
Dos en uno, no pude sentir que ahora esa frase era más real que nunca.
Abrí los ojos, ahora sí reconocía dónde estaba, era una de las habitaciones del hospital de konoha.
Mire el calendario, habían pasado ya dos semanas desde el suceso de los tipos de los pergaminos
- Hola - mire hacia la puerta, era Sakura
- Hola - ella avanzó hacia mí y empezó a ver cómo me encontraba.
Ambas nos quedamos en silencio, ella lucía cansada y un poco sorprendida
- Parece como si hubiera sido un milagro - rompió el silencio y me miro - A shikamaru y tú los salvó un milagro
Sonreí, al parecer si se encargó él
- ¿Cómo está él? - Sakura sonrió y se sentó en la silla que estaba al lado de la cama.
- Bien, despertó una semana antes que tú - suspiró cansada, ahora sí volviendo a hablar con la confianza de siempre - todos estos días ha estado preguntado por ti, pero lo que me pareció curioso fue que... ¿Sabías que estás embarazada? -Yo le sonreí y asentí.
- Shikamaru también lo sabe, supongo que por eso está de preguntón
- Sí, debe ser - se levantó de la silla - bueno, te dejo tema, está atardeciendo pero el trabajo no acaba - sonrió y se fue.
Miré hacia la ventana apreciando el lindo atardecer, acaricié mi vientre que aún se encontraba plano.
- Tu papá está muy ansioso - sonreí.
- Sí, lo estoy - miré hacia la puerta, shikamaru estaba ahí con su suero en la mano, tenía puesta una sudadera y una camisa blanca. - no sabes cuánta falta me hiciste problemática - se acercó y se sentó en la cama
- Te ves horrible - le dije y él sonrió.
- En cambio tú te vez hermosa - me tomo del mentón y me beso, fue un beso lento y cariñoso
No pude evitar sonreír
- ¿Cómo está mi prometida casi esposa? - susurró sobre mis labios.
- Ahora bastante bien - sonrió.
- ¿Y mi hijo que aún no nace? -
- Se encuentra muy bien - lo tomé de las mejillas y volví a unir nuestros labios.
- Te amo - susurró shikamaru - Te amo demasiado - Sentí cómo su lengua empezó a entrar a mi boca.
También te amo, dije internamente, no sería capaz de interrumpir el beso, no esos besos.
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Se desaparece otra vez.
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My Baby...
RandomEl dolor de perder a una madre es algo que jamás se supera y temari lo sabe perfectamente.