Naruto: El ninja musical

De regreso a casa

Naruto: Estoy en casa.- Dijo con una sonrisa en su rostro. Después de casi dos meses fuera de su hogar por fin regresó. Fuu, quién había terminado de vomitar, regresó con nuestro protagonista y admiró la vista junto a él.

Fuu: Así que esta es la gran Aldea de la Hoja. Tu hogar.

Naruto: Sí, y estoy de vuelta.

Fuu: Bueno ¿Qué esperas? Vamos, hay que ir con tu padre.- Dijo para después tirar de él arrastrándolo a la aldea.

Saludó a los guardias Izumo y Kotetzu, los cuáles lo recibieron con mucho gusto. Caminó por las calles de la aldea recibiendo saludos llenos de alegría de los aldeanos.

¿?: Malditos hipócritas.- Murmuró la voz dentro del rubio. Quien al escucharla, se sobresaltó al sentirla pegada a su oído. Aunque se vio obligado a ignorarla de nuevo, ya que habían llegado a la Torre Hokage.

Subió hasta la oficina de su padre, iba a tocar la puerta cuando escuchó una conversación en curso.

Minato: Les repito, no puedo darles más misiones fuera de la aldea por al menos 2 días. Solo esperen, él está bien.

Zabuza: Es una pena, pero lo entendemos. Volveremos en unos días entonces.- Cuando abrió la puerta para salir, vio a Naruto con la oreja pegada a la puerta.- Niño- Dijo con los ojos levemente abiertos.

Naruto: Hola- Fue todo lo que pudo decir antes de ser abrazado por Haku.

Haku: Por fin volviste. Nunca nos encontramos contigo en ninguna de las misiones que...

Zabuza: Que nos asignaron por nuestro excelente desempeño- Interrumpió a su hija adoptiva

Naruto: No tienes que mentir. Los escuché insistir por misiones fuera de la aldea. ¿En verdad me extrañaban tanto?

Haku: Sí.

Zabuza: No.

Naruto: Aw que tiernos. Me extrañaban.- Comentó con burla

Zabuza: Claro que no.

Naruto: Claro que sí.

Zabuza: Claro que no.- Reafirmó apretando los dientes.

Naruto: Está bien, te creo.- Dijo con completo sarcasmo.- Ahora, si me disculpan, debo dar mi reporte de misión.

Haku: De acuerdo, nos vemos luego. Es un gusto que estés de vuelta.- Dijo para abrazarlo y retirarse.

Después de irse, se quedaron unos segundos en silencio. Antes de que el rubio pudiera decir palabra, su padre habló.

Minato: Antes que nada.- Se levantó de su asiento, se acercó a su hijo, y le dio un muy fuerte abrazo.- Me alegra que hayas vuelto.

Esas palabras calmaron una ansiedad que no sabía que tenía, y fue reemplazada por una sensación cálida en su pecho.

Minato: Ahora ¿Qué pasó durante tu viaje?

Y entonces Naruto comenzó con su relato. Decir que Minato estaba impresionado era un eufemismo, estaba que su corazón salía de su cuerpo. Sabía que su hijo era experto en sorprender, pero esto era demasiado. Fue cortejado por la Mizukage, enfrentó física y verbalmente al Raikage, y retó directamente al Tsuchikage. Quien sabe que clase de divinidad impidió que su hijo desatara una guerra, pero le estaba muy agradecido.

Ah, también sacó a una jinchuriki de su aldea, ya en serio ¿qué tan grande es la suerte del chico?

Minato: Vaya... básicamente la mi sión fue un éxito.

Naruto: Sí. Por cierto, me gustaría que Fuu se quedara en el que era mi departamento.

Minato: Dudo que eso sea posible. Los cuatro del sonido y Kimimaro están viviendo allí. Podría quedarse en nuestra casa.