𝐀𝐠𝐚𝐩ē/Amor sin condición/-"Solo fue necesaria una mirada para saber que caería rendido a los pies de aquella mujer, con una belleza fuera de este mundo tan impulsiva, sensible y alocada, conservando su inocencia y dulzura, que parecía súmamente...
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Amaba el cielo nocturno, era era muy hermoso a la vista y tan sereno con millones de estrellas en el.
Y la luna tan reluciente era un paisaje nocturno magnífico.
Me quede contemplado las estrellas y una amarga sensación me inundó el corazón.
Estuve susurrandole a la luna con una gran tristeza.
Explicándole en mi inexplicable melancolía, como me sentía y entre susurros y tristeza me puse a recordar, cada suceso que me trajo hasta este preciso lugar.
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Desde el primer día que conocí a los hermanos Howard , su calidez y amabilidad me envolvieron. Sydney, era la mayor, con su sonrisa contagiosa y Ian, el joven que se alistaria en el ejército de ser necesario, con su determinación inquebrantable. Pronto me adoptaron como a una hermana, implicándome en cada momento especial de sus vidas.
Juntos compartimos risas, lágrimas y sueños por el futuro. En su presencia, encontré un refugio de apoyo inquebrantable que valoro más de lo que las palabras pueden expresar.
Un mes después Ian y Sydney me invitaron cordialmente a quedarme en su deslumbrante mansión en Texas allí podría aprender más sobre música. Con una sonrisa cálida, me extendieron la invitación para disfrutar de la hospitalidad sureña y de la exquisita arquitectura de su impresionante residencia -"Será un placer tenerte con nosotros"- dijeron con amabilidad, asegurando que se encargarían de que su estancia fuera inolvidable. Después de pensar un par de días decidió que lo mejor era irse.
