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Amelia's pov
Caminaba por los solitarios pasillos del castillo, me dirigía al lago negro pues tenía insomnio y decidí dar un paseo antes de despertar a mis compañeras de habitación.
La noche estaba fría, el oscuro cielo despejado y las estrellas brillaban en lo alto, el viento soplaba suavemente haciéndome estremecer bajo el camisón de pijama, había olvidado tomar un abrigo antes de salir.
Salí de mis pensamientos cuando me di cuenta que había llegado a los jardines, caminé sintiendo el césped bajo mis pies descalzos hasta llegar al lago donde me acosté a la orilla mirando el cielo; de pronto una ola de recuerdos me invadió haciendo que mis ojos se humedecieran.
Flashback
Una joven se encontraba corriendo por los pasillos buscando a su novio, la capa de Slytherin se agitaba con fuerza al igual que su larga y oscura cabellera. Mentiría si no dijera que estaba realmente molesta, estuvo esperando durante tres horas en las tres escobas a su pareja con quien se suponía que debería haber tenido una cita, sin embargo este nunca llegó, y ella cansada de tanto esperar decidió marcharse al castillo de vuelta, sin embargo eso no se quedaría así, él le debía una buena explicación.
Llegó hasta la sala común de su casa y al entrar hubiera deseado nunca haberlo hecho, Dash, su novio se estaba besando con Sienna, una linda chica de Ravenclaw, castaña y de ojos grises, exactamente la chica por la cual Amelia tenía inseguridades, especialmente porque era la ex de Dashiel y siempre buscaba la manera de meterse en su relación.
El chico fue el primero en notar la presencia de su pareja, que se encontraba paralizada en medio de la sala, separándose así rápidamente de la chica y empujándola de encima suyo.
—Linda! No es lo que parece... yo puedo explicarlo —intentó acercarse a la joven, sin embargo esta retrocedió
—Ni se te ocurra tocarme, me das asco, no quiero volver a verte en mi vida, ojalá se pudran los dos —dijo con un nudo en la garganta, sin embargo no se permitió mostrarse débil ante ellos y dijo aquello con un tono fuerte y seguro
—No, no puedes dejarme, no tú, yo te necesito Amelia, estamos comprometidos —tomó del brazo a la chica quien se soltó bruscamente y le soltó una bofetada
—Te dije que no me tocaras! Esto se acabó Dashiel, haber pensado antes de meterte con la primera que se te cruzara enfrente. —nuevamente se volteó para marcharse de allí pero antes se detuvo en la puerta —Oh y no te preocupes, hablaré con mis padres para que cancelen el compromiso.
Sin más salió azotando la puerta. Esa noche se quedó en la torre de astronomía, donde se durmió llorando y pensando en que había hecho mal, si no era lo suficientemente buena o linda para él, aunque claramente nada de lo que ella pensaba era verdad.
