La abuela - Un fic de Denji, Nayuta y Quanxi

One Shot

China, primera mitad de los 2000s.

Meterse a China sin que su madre se diera cuenta era casi imposible, pero Denji prefería que todo fuera sorpresa (y además él tampoco quería meterse en problemas)...afortunadamente para el rubio de ojos amarillentos y dientes afilados, cuenta con un buen apoyo para estar en el país, sin ser detectado o reconocido por alguien que pueda avisarle a su madre.

Kishibe, quién esta sentado frente a Denji en la mesa de un restaurante - mientras todos comen un estofado.

-Sopla- Denji le menciona a su hija, que da un soplido a la cuchara con estofado -Muy bien- Denji le dice a su hija, metiendo la cuchara en su boca.

-Mmm- Nayuta traga el estofado con simpleza, sentada en la falda de su padre.
La niña heredo en su mayoría las facciones de su madre (en particular, sus ojos anillados), pero se nota que ha sido criada exclusivamente por Denji - viste modestamente un pequeño vestido negro.
Es una niña bien portada...la mayor parte del tiempo...quiere insistir Denji - es más o menos cierto...

Kishibe suspira, llevándose su vaso a la boca -¿Ya pensaste en que vas a decirle a Quanxi?- El hombre de la boca cicatrizada pregunta. Es mejor prevenir que curar, especialmente cuando se trata de una mujer tan peligrosa.

-Nah, pensar mucho en ese tipo de cosas hace que me duela la cabeza- Denji insiste, masajeándose un poco uno de los costados de su cabeza, mientras que con su otra mano seguía alimentando a Nayuta.
No es que Denji sea incapaz de planificar, pero es difícil pensar en ese tipo de cosas - su relación con su madre siempre ha sido más bien tensa.

-Así que simplemente estamos esperando por lo mejor.- Kishibe señala con su voz un poco ronca...
-Seh, básicamente- Denji concede, bajando los hombros después de que Nayuta tome otra cucharada del estofado.

-Yum- Nayuta menciona, felizmente ignorante de las implicaciones de la discusión de su padre, y Kishibe.

***

Al día siguiente - en Beijing...

El par de hombres camina hacía un hotel muy alto, en un área relativamente lujosa de la enorme ciudad de Beijing - en su totalidad, donde caminan miles, sino millones de habitantes (el municipio de Beijing tiene más habitantes que algunos países del mundo).

-¿Podemos ir a ver un panda?- Nayuta pregunta a su padre, quién la esta llevando en sus hombros.
-Quizás más tarde, u otro día- Denji le asegura a su hija que pueden ir a ver un panda en otro momento, aunque quizás no puedan cumplir eso realmente.

-Mmm- Nayuta suspira, colocando su cabezita contra el pelo rubio de su padre.

Todo se decidirá en unos momentos - Al entrar al hotel, Kishibe entrega a Denji un papelito con la dirección de la habitación de Quanxi -Ve a la habitación, yo entretendré a los recepcionistas un rato- Kishibe le dice a su discípulo, que asiente con simpleza observando el número.

El hombre de boca cicatrizada va hacía la recepción como dijo - y en un segundo Denji ha subido varios pisos como si nada, moviéndose en casi un parpadeo a gran velocidad.
-¿Uh?- Nayuta exclama confundida en la espalda de su padre, no habiéndose dado cuenta de cómo pasó...

Denji es muy rápido, principalmente por su contrato con un demonio - su madre tiene habilidades similares.