Este mundo es cruel, es injusto, todo desde que, aquella vez en la Era Heian, un hechicero malvado, en busca de la optimización de energía maldita, cambio el mundo entero. Ahora, el 20% de toda la humanidad, equivalente mil seiscientos millones de personas poseen una habilidad, un don, a estas personas se le conocen como "Hechiceros" y a su habilidad, Poder Maldito.
Su capacidad para manipular esta fuerza oscura se convierte en un arte, y la sociedad se divide según los distintos rangos que estos maestros de la energía maldita pueden alcanzar, desde el modesto rango cuatro hasta el enigmático rango especial.
La energía maldita, nacida de las emociones negativas, se convierte en una expresión cruda de los sentimientos humanos.
Los civiles, incapaces de controlar esta emanación, generan Maldiciones, manifestaciones caóticas de energía maldita que se vuelven una amenaza constante.
En contraste, los hechiceros han aprendido a disciplinarse, controlando no solo sus poderes sino también sus propias emociones.
La naturaleza volátil de la energía maldita la hace comparable a la electricidad, impredecible y peligrosa sin la destreza adecuada.
Los hechiceros, hábiles en el arte de manipular la energía maldita, utilizan esta habilidad para moldear técnicas variadas.
Pueden emplearla para fortalecer sus cuerpos, endurecer su piel como una coraza protectora o canalizarla en ataques devastadores.
La maestría de estos hechiceros radica en la capacidad de controlar la energía maldita de manera precisa y efectiva.
La sociedad hechicera también se caracteriza por sutiles diferencias en la energía maldita que poseen los individuos.
Los hechiceros, incluso los de habilidad promedio, pueden detectar residuos de energía maldita y ocultar su rastro para evitar ser seguidos.
Algunos hechiceros de alto grado han desarrollado la capacidad de percibir el "gusto" de la energía maldita, lo que les proporciona un conocimiento más profundo sobre su propia energía y la de los demás.
En las situaciones más extremas, cuando un hechicero se encuentra al borde de la muerte, puede experimentar una conexión única con el núcleo de la energía maldita.
Este fenómeno, raramente explorado, sugiere una conexión más profunda entre los hechiceros y la esencia misma de la energía maldita.
La variedad de habilidades no se detiene ahí. Algunos hechiceros han descubierto cómo infundir propiedades especiales en su energía maldita, permitiéndoles liberar ataques a distancia sin necesidad de expandir un territorio.
Estas habilidades únicas hacen que cada enfrentamiento entre hechiceros sea una danza de poderes y estrategias, donde la creatividad y la astucia son tan esenciales como la fuerza bruta.
En este mundo donde la línea entre hechicería y maldición es difusa, los hechiceros deben enfrentarse no solo a Maldiciones sino también a las complejidades y desafíos de sus propios poderes oscuros.
La historia de esta sociedad fascinante se despliega en un telón de emociones tumultuosas y batallas intensas, donde el destino de cada hechicero se entreteje con la energía maldita que fluye en su interior.
En este mundo donde la energía maldita, los hechiceros y las Maldiciones son conocidos por el público, diversas instituciones a lo largo del mundo se dedican a reclutar y entrenar a aquellos con control sobre esta poderosa fuerza.
En Japón, la Universidad U.A. ha emergido como la institución más prestigiosa y renombrada del país para el desarrollo de hechiceros.
La U.A. se erige como una academia de élite, atractiva para hechiceros talentosos y prometedores. Su campus, imbuido con una atmósfera misteriosa, se convierte en el crisol donde los futuros maestros de la energía maldita se perfeccionan en sus habilidades.
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ᴋɪᴅ ᴀᴍɴᴇꜱɪᴀ - ᴊᴊᴋ x ʙɴʜᴀ
ActionYuta Okkotsu, 18 Años. Heroe de Grado especial. Técnica Maldita: Mimetismo.
