6. La mesa de los leones

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(Lily's version)

La pelirroja cabellera de Lily Evans era constantemente acomodada por ella misma, deslizaba sus dedos detrás de su orejas una y otra vez para mantenerse ocupada, la comida parecía no acabarse jamás, pero el nudo de nervios en su estómago no le permitía prestarle atención

– Deberías comer, preciosa, antes de que estos salvajes se terminen todo – una niña de salvaje cabello negro rizado y piel morena tomo el plato de Lily sin preguntar mucho más y comenzo a servir comida en abundancia

– Gracias – fue todo lo que Lily pudo decir, su confianza la había abrumado bastante

– ¿Quién es tu amiga, Mary? – una niña de corto cabello rubio se sentó frente a Lily con confianza, llenando su plato como Mary lo había hecho con el suyo

– No le pregunte, ¿Como te llamas, linda? – Lily jugó nerviosamente con sus deditos bajo la mesa

– Lily Evans – Mary tomó su mano y la estrechó con alegría

– Nombre precioso, yo soy Mary Mcdonald y ella es Marlene McKinnon, pero la puedes ignorar si quieres, pronto nos abandonara por los niños – el tono ofendido de Mary no pasó desapercibido para Lily, quien soltó una pequeña risa tímida

– Jamás, no después de ver a Peter hacer... – pareció pensarlo mejor al ver los rostros de sus compañeras – algo muy asqueroso –

– ¡Maravilloso! aquí sí hay pasteles de calabaza – una niña de cabello castaño y aspecto adorable extendió su mano a la gran montaña de pasteles, antes de notar en asiento vacío junto a Marlene

– ¿Les molesta si me siento? los niños de allá parecen no haber comido en cinco años –

– Por supuesto, me alegra ver la cantidad de niñas bonitas en esta escuela – las mejillas de la jovencita tomaron un color rosado mientras se sentaba

– Soy Alice Fortescue – Mary volvió con las presentaciones y junto con Marlene llevaron el humor en la mesa antes de que los prefectos los guiaran a las salas comunes

– ¿Sabían que las arañas pueden caminar sobre el agua? – soltó Marlene, de camino a la sala común

– Yo sí – Mary y Alice observaron confundidas a ambas niñas, esperando una explicación del extraño dato

– Un niño en mi mismo vagón dijo que a su hermana le gustan mucho los insectos, nos explicó que es porque su peso no penetra la superficie del agua o algo así – tres niños pasaron corriendo entre ellas, gritando que lo sentían, y un niño alto y delgado llegó caminando detrás de ellos, deteniéndose junto al pequeño grupo de niñas para presentarse

– Por favor disculpenlos, creo que se dieron la cabeza contra la puerta del vagón – las cuatro niñas sonrieron, el cansancio en su voz daba a entender que no fueron las primeras – soy Remus, Remus Lupin – Lily fue la primera en tomar su mano, motivada al ver el pequeño libro bajo el brazo del chico "Orgullo y prejuicio" su lectura preferida

– Lily Evans, ellas son Alice Fortescue, Mary Mcdonald y... – la pequeña pelirroja fue interrumpida por el chico

– Marlene McKinnon, estaba conmigo en el vagón – todos caminaron juntos a la sala común, hablando de lo mala compañera de vagón que era Marlene, lo extrañas que las materias resultaban para Lily, Remus y Mary, lo aterrada que estaba Lily acerca de la convivencia de su hermana Petunia, alguien poco paciente, con "sangre puras imbéciles y poco interesantes" como Marlene los había llamado y como esperaban ser compañeras de habitación 

Nota de la autora: 

Este si es más largo (por ciento diez palabras), y recién me doy cuenta que puse la mesa de la grandeza para los Slytherin, y a mi casa le puse "la mesa de los leones" James esta decepcionado de mí, una disculpa a los Gryffindor 

Paciencia conmigo porfis, tomen aguita y aprendan a nadar, tqm

Las hermanas Evans: La historia que pudo serDonde viven las historias. Descúbrelo ahora