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Llevaba ya mucho tiempo sentada en la pequeña hamaca que tenía fuera de casa, con la brisa dándome directamente al rostro,pero de una manera tan ligera que se sentía como una caricia sumamente dulce.

Estando ahí, aveces solo me gustaba imaginar que era una hoja, deslizándome tan delicadamente por el viento, sin producir ni el más mínimo ruido al realizar tal acción, que ante ojos con una atención única podía resultar un espectáculo bellísimo.

Ante los ojos de la persona correcta,yo sería su hojita, su espectáculo bellísimo.

Después de dejar por completo mi modo reflexivo, decidí salir un momento.

Me dirigí a una tienda, que para mí mala suerte, estaba algo lejos de casa, no me gustaba mucho salir, de alguna u otra manera siempre terminaba siendo juzgada con una mirada que me invitaba a solamente irme de cualquier lugar.

Entré en la tienda y me fui directamente a los estantes de alimentos, ya no me daba puntos extra ni saludar, nadie logra comprender mis señas, elegí algunas cosas básicas que me servirían para la semana.

Como es de costumbre me tarde mucho en acercarme a la caja registradora a pagar, lo pensé más de dos veces, estando cerca del mostrador saque las cosas que había seleccionado para llevarme

Trate de actuar con naturalidad mientras sacaba mi pequeño monedero de uno de los bolsillos de mi chaqueta,pero el nerviosismo seguía.

- Bien, son 33.70

Me quedé quieta por unos momentos tratando idear alguna manera de que pueda entenderla y ella a mí.

Y es que sufría de problemas de sordera, debido a esto se me impidió entender,imitar y practicar el habla, solo podía comprender a través de textos escritos o señas, pero no podía pronunciar palabra alguna, debido a que no sé cómo suena verdaderamente cada palabra.

Ahora ¿como explicarle eso a la vendedora?

Entré en pánico y no supe hacer nada más que lo de siempre, tratar de hacerle saber con señas de que no podía escucharle.

Esta se quedó atónita y confundida mirándome en mi intento desesperado.

- ¿Te comió la lengua el ratón?¿O acaso no fuiste a la escuela? Mira, si continúas así mejor retirate de mi tienda.

No sé que dijo, pero me quedé quieta nerviosamente,mis ojos empezaban a cristalizarse en señal de que quería empezar a llorar por la frustración, y las personas que miraban la escena solo lograban que me avergonzara más.

Fue cuando supongo que volvió a repetirlo y apunto hacia la puerta, ya conocía esa señal, no me quería más en ese lugar.

No perdí más tiempo y salí lo más rápido que pude de ese lugar, ya con lágrimas recorriendo todo mi rostro.

Levanté la vista un momento para mirar mi alrededor y tomar una dirección, ir a casa ahora no era opción, estaba muy ansiosa, fue cuando ví el inicio de un pequeño bosque , me adentré en este pero está vez más pausadamente, claro que aún llorando.

Había un hermoso árbol, muy grande, con hojas brillantes y verdosas, me senté al lado de este, poniendo mis rodillas a la altura de mi pecho y abrazándolas con ambos brazos, agachando mi cabeza mientras los pequeños sollozos continuaban.

Fue cuando perdí la noción del tiempo que sentí un ligero toque en mi hombro derecho, levanté lentamente mi cabeza para ver de quién se trataba, los cabellos que estaban sueltos por mi rostro me impedían un poco ver, pero los quité con mi mano rápidamente.

Y lo ví a él.

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Esto por ratos se me está haciendo complicado pero ojalá averlos entretenido con este primer cap.

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⏰ Última actualización: Jan 26 ⏰

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