SIX

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|The Nigth|

Los días habían pasado inesperadamente tranquilos para yoriichi, en verdad su alegría se basaba en esperar el mensaje de una persona en especial, aunque la conversación se basará en solo once mensajes o máximo veinte, disfrutaba los mensajes de su contrario, además de que se veían una que otra vez y hablaban un poco de cómo había sido su día y cosas triviales.

Hoy no iba a ser la gran excepción, estaba en su oficina organizando papeles y revisando las citas o reuniones que tenía ese día, estaba algo aburrido.

Hasta que el zumbido de su celular lo saco de revisar lo dichosos papeles, tomo su celular y vio que se trataba de sumiyoshi, un simple mensaje de "Hola, como estás" algo simple, pero agradeceria que está vez fue él quien tomó la iniciativa para hablar.

Respondió un simple "Bien y tú:))" tampoco quería sonar tan seco si era sincero, su conversación siguió, yoriichi juraba que la conversación estaba dudando más de lo normal. Eso le alegraba, después de hablar unos minutos más sumiyoshi soltó el mensaje "¿Te gustaría acompañarme a una fiesta?" 

¿Yoriichi había leído bien? Después de releer el mensaje efectivamente sumiyoshi lo había ¡Invitado a una cita! (O almenos desde su punto de vista era así) debía prepararse, Denia demostrar que era el mismos amable yoriichi que hace décadas atrás se había enamorado. Con toda la naturalidad del universo contestó al mensaje

"Sí."

Si bueno, eso se veía como si estuviera obligado a contestar. Pero estaba más que emocionado, solo bastaron los segundos para que su contrario respondiera.

"Bien, te veo en el café a las 7:00pm, no tienes que ir formal"
"Ya debo irme, gracias, gracias yorii :)"

Si no fuera un adulto responsable y serio probablemente estuviera saltando de la emoción cuál adolescente enamorado. Era su momento, debía demostrar a la persona que amo tanto tiempo atrás que era el mismo y estaban destinados a estar juntos una vez más.

Dio un suspiro y dejó su teléfono a un lado, terminaria su trabajo para que no terminara tan tarde y poder ir con sumiyoshi.

Sería una noche espectacular. De eso estaba seguro.

[♡⁠˖]

Eran exactamente las seis y media, había terminado -a la carrera- todo el trabajo que pensaba posponer para días, pero estaba motivado renovado y por supuesto emocionado, tomo las llaves de su auto y salió de su oficina.

—Uta por favor dile a los demás que pueden irse a casa.— La mujer de ojos obsidianas asintió y miro al pelirrojo irse hacia el ascensor para ir hacia la salida.

Después de bajar de el décimo piso, subió así auto lo encendió y conducir hacia la cafetería donde lo esperaría el burdeo. Sentía su corazón latir rápidamente, pero no le importa, probablemente saldría de su pecho pero no era de mucha preocupación.

Después llegó a la cafetería, había llegó justo a tiempo, no ke gustan ser impuntual realmente, así que era como una forma de compensar la vez que se le hizo tarde.

Se estacionó en frente esperando que sumiyoshi reconociera su auto, por suerte lo reconoció en seguida y salió cerrando detrás de si la puerta del café.

—Fuiste más puntual de lo que esperaba.— Se acercó al auto del contrario abriendo la puerta y entrando en el interior.

—Supongo, no me gusta ser demasiado impuntual.—

recuerdos del ayer |Yoriisumi|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora