Capítulo 2 : Travesuras en el patio de la escuela (Michelle Jones/MJ)

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El sol de la mañana que entraba por la ventana despertó a Peter de su sueño. Peter se agitó, se sentó e inmediatamente deseó no haberlo hecho. Con la cabeza palpitante y la boca seca por la resaca, el joven héroe miró a su alrededor, sin reconocer temporalmente su entorno. De repente, Peter se dio cuenta de que estaba desnudo. No fue el único. Acostada junto a él había una mujer mayor en el mismo estado de desnudez. ¡Sra. Stark!

Los acontecimientos de la noche anterior volvieron a la mente de Peter. ¡ Se había acostado con la esposa de Iron Man! Entrando en pánico, el adolescente rápidamente se vistió, mientras se preguntaba qué iba a hacer. A pesar de sus preocupaciones, Peter no pudo evitar admirar el cuerpo de Pepper, sin mencionar sus habilidades en la cama. Mientras pensaba en esos últimos recuerdos, Parker sintió que comenzaba a ponerse erecto. Para evitar caminar con una erección, el adolescente salió de la habitación y entró en el dormitorio de invitados en el que se suponía que debía haber dormido.

"Hola Pedro". El héroe se giró, sorprendido por la voz. Sentada en la mesa había una pequeña niña de cabello castaño, saludando alegremente al adolescente. Relajándose un poco, Peter le sonrió a la chica "Hola Morgan, ¿cuánto tiempo llevas despierta?" preguntó. Un encogimiento de hombros fue su única respuesta. "Bueno, ¿qué tal si nos preparo algo de desayuno?" preguntó Peter y recibió su respuesta en forma de un asentimiento entusiasta. Peter metió la mano en el frigorífico y empezó a recoger cosas para el desayuno.

Pronto los dos estaban comiendo felices. "Entonces, ¿mami y tú se divirtieron anoche?" preguntó Morgana. Peter casi se ahoga con su bebida. "¿Q-qué quieres decir?" aventuró el adolescente, "Te escuché hablar después de que mamá entró", dijo Morgan. Con un suspiro mental de alivio, Peter respondió: "Oh, sí, hablamos un rato y nos conocimos". Aparentemente satisfecha con esto, la chica Stark volvió a desayunar.

Unos minutos más tarde, Morgan volvió a levantar la cabeza para hacer otra pregunta: "Escuché a mamá decir algo sobre un juego. ¿Jugaste al doctor?". ella preguntó. Antes de que Parker pudiera responder, la niña explicó: "Uno de los amigos de papá era médico antes de ser mago y me dio algunas de sus viejas cosas de médico para jugar".

Peter dio otro suspiro mental antes de que se le ocurriera algo. "Um Morgan... ¿escuchaste algo... más anoche?" Peter preguntó con cautela, temiendo la respuesta. "No. Nada más, me quedé dormido" respondió Morgan encogiéndose de hombros, "Pero sí te vi saliendo del dormitorio de mami esta mañana". Peter se devanó los sesos tratando de encontrar una excusa. "¿Tuviste una pesadilla?" preguntó la niña con simpatía "Cuando tengo pesadillas mamá a veces me deja dormir en su cama".

Parker aprovechó la oportunidad que se le presentó. "Sí, lo hice, pero no se lo digas a nadie, ¿vale? Será nuestro secreto", dijo Peter, llevándose el dedo a los labios mientras Morgan hacía lo mismo.

Un poco más tarde, la puerta del dormitorio de Pepper se abrió y la mujer salió. "Buenos días mami" saludó Morgan. "Buenos días cariño", sonrió su madre. Cuando sus ojos se encontraron con los de Peter, la sonrisa de Pepper se desvaneció ligeramente. "Morgan, cariño, ¿te importaría irte? Peter y yo tenemos cosas de adultos de qué hablar", dijo la pelirroja. "Pero Peter no es un adulto" señaló la niña. "Morgan..." dijo Pepper con reproche, haciendo que su hija se fuera.

Después de que Morgan se fue, Pepper suspiró y se pellizcó la nariz. "Mira Peter, por mucho que no quiera, tenemos que hablar de anoche". Incluso esperar plenamente la conversación no la hizo menos incómoda para Parker. "Señora Stark", aventuró (se sentía mal llamarla Pepper después de lo sucedido) "Lo siento, fue mi culpa estar borracho y..." Antes de que pudiera continuar, el adolescente fue interrumpido por una mano levantada" No lo hagas", dijo Pepper. "Si alguien tiene la culpa soy yo. Te animé a beber y, en todo caso, estaba más borracho que tú". Un silencio incómodo flotaba en el aire. Finalmente el joven héroe lo rompió. "¿Y ahora qué pasa?" preguntó. Suspirando de nuevo, la señora Stark respondió; "No lo sé, pero aceptemos que fue un error y no hablemos más de eso".

Suerte ParkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora