Odio estar aquí... simplemente, odio saber que ella piensa que soy alguien peligroso.
¿por qué? me lo pregunto varias veces.
yo solo quise ayudar, no era mi intención.
— suelo odiar tu personalidad, pero esto ya es peor de todos modos. ¿que pasó con la violeta, no debería haber regresado contigo? ¿por qué estoy atada? - Reclamó V molesta.
suspiré. entristecido me levanté del suelo y sin ánimos, sin voltear mi cuerpo para verla, le dije:
— V, Somos una amenaza para todos. - le contesté fríamente, aunque, eso no respondió sus dudas obviamente.
— ¿Que ocurrió para que te pongas tan frío y seco? - cambió a un tono un poco preocupado. esta vez si la miré.
— olvídalo, no ocurrió nada interesante. - me dispuse a caminar hacia el lado contrario. Por primera vez, siento que... mis ánimos se... desvanecen, como si mi corazón estuviese roto, al punto de estallar emocionalmente.
salí de la nave aún entristecido, suspiré y me senté en el suelo a pensar un poco.
no suelo ser tan serio, ¿que me está pasando?
la quiero tanto que me deprime saber lo malo que soy. aunque... ¿realmente es mi culpa?
Yo... Estoy realmente confundido.
Me estremecí y abrí mis ojos con sorpresa al sentir la presencia de alguien más, J.
— N. - me dijo con un tono serio como lo habitual.
— ¿que necesitas, J? - respondí sin ánimos, con un poco de firmeza al estar presente a mi jefa.
— no necesito nada, solo vengo a decirte que no pierdas el tiempo pensando en esa absurda chica aquí sentado. Tienes un trabajo y es Matar a los drones obreros, no hacerte sus amigos como el idiota que eres. -
solo agaché la mirada aún más desanimado, me hirió aún más de lo que ya estaba pero seguía con mi semblante serio y frío. ella volteó hacia el otro lado para irse, pero yo hablé.
— J, no me estás ayudando. - le dije.
ella se detuvo. volteó lentamente mientras se enojaba.
— ¿acaso crees que estoy aquí para ayudarte como si fueses tan importante? N, N... ¿cuantas veces hay que repetirte las cosas para que entiendas? eres un inútil, sigo sin entender el por qué la compañía permitió que un dron tan estúpido llegara a mi escuadrón. - frunció el ceño, hablando aún más molesta.
— Pues repíte cuantas veces quieras, no haré caso a lo que me digas, yo puedo pensar a mi manera. no me importa. - le dije molesto.
me miró, aunque, esta vez había algo diferente en su cara...
un poco de rabia, mezclado con una pizca de irritación absoluta y amarillo penetrante como un sol.
— ¿QUE ES LO QUE ACABAS DE DECIRME? - sé dibujaron unas sejas virtuales haciendo su ceño fruncido
me atreví.
lo hise,
me atreví a alsarle la voz a mi jefa.
grave error, conociendo a J, tal vez me mate.
— ¡ERES PEOR DE LO QUE IMAGINABA! - se acercó bruscamente. me levanté a su mismo ritmo con mi expresión seria y con algo de temor. — ¡VETE! ANTES DE QUE ME HARTE MÁS Y TE MATE. - me señaló a otro lado. — ¡TE IRÁS DE AQUÍ Y NO VOLVERÁS, TE DESTIERRO! -
en ese momento, quedé algo asustado. no tanto por el echo de que J estaba gritando, sino...
porque estoy siendo expulsado de el único lugar donde podía vivir.
es decir... en la colonia nunca ne van a tratar ahí, en cualquier lugar donde sea el exterior, J me encontrará y me matará. tragé saliva.
— que te quede claro, N. estás al riesgo de morir si te vuelves a aparecer por esta zona, no creas que tendré piedad. - me amenazó, yo asentí y perdí la valentía por completo.
ví como caminó un poco hacia la dirección contraria, estiró sus alas y despegó volando hacia otro lugar.
...
no me quedaba otra opción, suspiré nervioso y asustado.
tendré que ir a la colonia, o moriré.
prefiero el rechazo que morir, me parece mejor.
aunque, estoy aún más preocupado por Uzi que por mí mismo.
¿qué siento?...
estoy nervioso, al saber... que me odias, Uzi.
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676 palabras. 🩶
