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Lucian

Luego de que Valentina se fuera, vuelvo a mi oficina intentando concentrarme pero me es imposible, analizo mi situación en este momento

Nueve años atrás mi hermano mellizo decidió quitarse la vida por el amor de una mujer o mejor dicho de una niña, en ese entonces el solía hablarme de una chica que había conocido en el campamento y que era la hija del famoso Raul Linder, me dijo que había estado íntimamente y que había sido lo mejor para el, luego de un año de relación, ella decidió terminar con el diciéndole que nunca lo amo y que si estaba con el era por su dinero, ya que ella y su madre pocas veces recibían el dinero de su padre ...

Steve no pudo soportarlo y luego de tres meses en depresión decidió terminar con su dolor, yo intenté ayudarlo de todas las formas posibles pero me fue difícil, ya que el se negaba a salir a delante, fue por eso que decidí vengarme de ella.

El problema y lo que aun no comprendo es que cuando conocí  a Valentina ella no parecía la chica que Steve describía, e incluso cuando se entregó a mí, note que fue su primera vez

Tendré que investigar...

- No sabes a quien acabo de ver - dice Mike  entrando a mi oficina

- ¿No sabes tocar? - digo molesto

- A veces lo olvido, pero no importa, adivina a quien acabo de ver allá abajo - dice el

Yo lo miro sin entender, acaso llego alguien más a irrumpir en mi oficina...

- No se, habla de una vez - digo
.
- A tu romance de juventud, a Valentina Linder - dice el

- ¿Y luego? - pregunto aun sin entender su punto

- Como que ¿y luego? Lucian, ella esta aquí... y adivina qué... venía con un niño que dice ser su hijo, no lo pude ver bien al niño pero le calculo unos seis o siete años - dice el

Yo río al ver su confusión

- Lo se Mike, ella vino aquí  por mí, y el niño del que hablas es mi hijo - digo de lo más tranquilo

Escucho a Mike atragantarse mientras tose fuertemente, yo lo miro hasta qué este calma su tos

- ¿Cómo que tú hijo? - dice este con su voz ronca por la tos - ¿Qué acaso no te cuídate?, ¿Cómo estas seguro de que es tuyo? - dice el

Entiendo su confusión, pues si alguien me lo hubiera dicho, no lo habría creído

- Si Mike estoy muy seguro de que es mío- digo

- Wao, jamas pensé ver a Lucifer cómo padre - dice este - ¿y sabes qué es lo gracioso?, que si el es tu hijo, eso lo convierte en el hijo de Lucifer - dice este con tono divertido

Yo lo miro mal ante su comentario, pues en realidad me gane ese apodo debido a mí mala forma de ser al momento de los negocios, yo no soy alguien que se apiade de sus enemigos

- Basta, ya que estás aquí, necesito que me investigues todo acerca de la familia Linder, necesito que lo tengas a más tardar mañana - digo

El me mira sin entender pero asiente, yo termino todo lo que falta, al ver el reloj son las siete de la noche, tomo mi saco y me dirijo hacia la dirección que dejo Valentina.

Al estacionar el auto, noto que son departamentos situados en una zona segura, lujosa aun que no tanto como a las que yo acostumbro

Me acerco a la puerta y toco el timbre, escucho pasos acercándose y al abrir la chica frente a mi me mira con sorpresa para luego sonreír

- Hola Lucian, tanto tiempo sin verte - dice Carla

- Lo mismo digo Carla, te ves bien - digo

- Gracias - dice ella- pero pasa Alexander saldrá en un momento Valentina lo mando a darse una ducha - dice

Yo asiento y entro, observo todo a mi alrededor, al parecer se ve bien, limpio y todo ordenado, un poco extraño considerando que hay un niño y estos suelen hacer desastres siempre, espero unos cuantos minutos cuando escucho pasos corriendo y al voltear veo que el pequeño viene corriendo hacia mí, me toma desprevenido cuando se me lanza encima pero logro cargarlo sin dejarlo caer o golpear

- Papá si viniste - dice el con emoción

- Te prometí que lo haría y aquí me tienes - digo dándole una sonrisa

Sus ojos brillan con emoción  mientras se limita a abrazarme, Carla nos observa  y sonríe, esta camina hacia lo que creo que es la cocina y luego de unos minutos vuelve con dos vasos de jugo.

- Toma, si mal no recuerdo te gusta el jugo de arándanos - dice ella dejando los vasos sobre una mesita que esta frente  al enorme sofá

Yo me encamino con el pequeño hombrecito aun en mis brazos y tomo asiento, lo acomodo a el a mi lado y este toma uno de los vasos sin siquiera respirar, yo lo miro asombrado, pues casi a nadie le gusta el sabor de este jugo

- Alexander, ¿donde están tus modales? - dice Valentina saliendo de un pasillo

- Lo siento mami, tenía sed - dice el

Esta solo niega y se dirige hacia donde esta el niño

- Dámelo - dice ella refiriéndose al vaso

Este se lo entrega y ella se va hacia la cocina, yo me limito a ver a aquel niño dándome cuenta de cuan idéntico es a mi

Valentina vuelve en unos segundos y se sienta en el sofá que esta junto a el nuestro

- Bien, quiero hablar contigo - dice ella viéndome - Alex cielo puedes ir con la tía Carla a comprar los dulces que a ti te gustan para que papá los pruebe - dice ella

El pequeño chilla emocionado y corre hacia Carla

- Volveré pronto - dice el dejando un abrazo en mi y yéndose rápidamente

En cuanto ellos salen, mi expresión cambian radicalmente

- ¿De que quieres hablar? - digo

- como verás, Alexander está más que feliz de conocerte, y no tengo el corazón como para matarle esa ilusión a mi hijo, por lo tanto estoy de acuerdo en que convivas con el, puedes llevarlo a tu casa con tu familia y que pase el fin de semana o los días que tu quieras y que el acepte estar contigo - dice ella

Yo la miro mientras entrecierro mis ojos, es un poco extraño su cambio de opinión

- ¿A qué estas jugando?, no me creo eso de que hayas cambiado de opinión tan pronto- digo

- No estoy jugando a nada, pero Carla me hizo entender que Alexander no tiene la culpa de lo que pasó entre nosotros en el pasado, el puede crecer con ambos aun que no seamos una pareja, pero eso si todo esto lo acepto a cambio de una condición - dice ella

- ¿Una condición? - digo burlón - Aprovechas que estoy dispuesto a todo con tal de que me dejes ver a mi propio hijo, de verdad que eres una ambiciosa - digo molesto

Ella frunce los labios mientras me mira mal

- Primero que nada, no te estoy pidiendo dinero, además mi hijo no esta a la venta, ¿que te crees?,  si quieres estar a su lado, solo te pido que seas el mejor padre que el pueda tener, y sobre mi condición es que lo protejas a toda costa - dice

- ¿Protegerlo?, ¿de qué? - digo

- De que no, de quién querrad decir, verás Lucian yo también tengo enemigos y unos muy pero muy malos, dispuestos a atacar a un niño si es necesario con tal de verme derrotada, ellos quieren hacerle daño solo por que es mi hijo, lo que no saben es quien es su padre, por eso te pido que lo cuides, mientras este bajo tu responsabilidad, procura que nadie que no lo conozca se le acerque - dice ella, y puedo notar la suplica en lo que acaba de decir.

¿Pero que fue lo que hizo para tener a alguien de enemigos que quiera dañar a mi hijo?

La venganza de Lucifer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora