-Hitler y Mussolini se conocieron por primera vez en Venecia, Italia, el 18 de marzo de 1934. Los dos hombres, cada uno el líder de su respectivo país, estaban en la ciudad para asistir a una conferencia internacionaI-
-Hitler era muy consciente de la importancia de su encuentro con Mussolini. Estaba ansioso por impressionarlo y demostrar su poder Él había planeado cuidadosamente cada detalle de la reunión, desde la ropa que llevaría hasta las palabras que diría-
-Mussolini, por su parte, era más desenvuelto y menos preocupado. Estaba seguro de su posición como líder de Italia y no sintía la necesidad de impresionar a nadie. Sin embargo, estaría dispuesto a escuchar lo que Hitler tuviera que decir-
-Cuando finalmente se encontraron, Hitler se acercó a Mussolini con un apretón de manos firme-
-y una gran sonrisa en su cara-
"Señor Mussolini, es un placer finalmente conocerlo en persona"
-dijo Hitler con una voz fuerte y segura-
-Mussolini devolvió el apretón de manos a Hitler y sonrió cálidamente-
"Ah, Herr Hitler, es un placer conocerlo finalmente también. He oído muchas cosas maravillosas sobre usted"
-dijo con voz suave y segura-
-Los ojos de Hitler se abrieron con sorpresa No esperaba que Mussolini fuera tan amigable y tan relajado. Mientras tomaban asiento, Hitler empezó a hablar de sus planes para Alemania y el futuro de Europa. Habló apasionadamente sobre su visión de un continente unido bajo dominio alemán, con un ejército fuerte y unificado-
-Mussolini escuchó atentamente, asintiendo con la cabeza siguiendo cada palabra de Hitler Cuando Hitler terminó de hablar, Mussolini simplemente sonrió y dijo-
"Ah, Herr Hitler, no puedo evitar estar de acuerdo con usted. Una Europa unida bajo el dominio alemán es exactamente lo que este continente necesita"
-La sonrisa de Hitler se hizo más amplia. Había encontrado un espíritu afín en Mussolini, alguien que compartía su visión del futuro de Europa. Comenzaron a discutir los detalles de cómo podrían trabajar juntos para hacer realidad su sueño-
-Mientras los dos líderes conversaban hasta altas horas de la noche, no sabían que su reunión tendría un impacto significativo en el futuro de Europa y el mundo-
-Hitler se acercó a Mussolini, con los ojos muy abiertos por la anticipación-
"Mussolini, tengo una idea que podría beneficiarnos a ambos. ¿Qué pasaría si formáramos una alianza? Las potencias del Eje, Italia y Alemania trabajarían juntas para lograr nuestros objetivos comunes ¿Qué opinas?"
-Mussolini consideró la propuesta de Hitler por un momento y luego asintió con la cabeza-
"Creo que eso podría funcionar, señor Hitler. Sería beneficioso para Italia tener un aliado como Alemania. Juntos, podríamos ser imparables"
-Hitler sonrió, sintiendo una sensación de satisfacción y alivio. Había hecho de Mussolini un poderoso aliado y juntos podrían llevar a Europa a una nueva era. A medida que avanzaba la noche, los dos líderes continuaron discutiendo sus planes, sus voces se volvieron cada vez más silenciosas mientras hablaban en susurros, conspirando para remodelar el mundo-
-A medida que avanzaba la noche, Mussolini se sintió cada vez más atraído por Hitler. La conducta confiada y las fuertes convicciones del líder alemán eran irresistibles para el dictador italiano. No pudo evitar notar cómo los ojos de Hitler brillaban con inteligencia y cómo su voz llenaba la habitación de autoridad. Mussolini empezó a preguntarse cómo sería estar cerca de un hombre tan poderoso, sentir la calidez de su tacto-
-Hitler, por otra parte, también empezaba a sentir cierta atracción por Mussolini. Admiraba la fuerza y el carisma del líder italiano y se sentía atraído por su actitud confiada, casi audaz. Hitler sabía que sería inapropiado actuar según sus sentimientos, pero le resultaba cada vez más difícil mantenerlos a raya-
-A pesar de la creciente atracción mutua, los dos líderes continuaron sus conversaciones. Hablaron de política, de historia, del futuro de Europa. Mientras hablaban, sus voces se hacían más bajas y sus miradas más frecuentes. Era como si fueran las dos únicas personas en la habitación, perdidas en su propio pequeño mundo-
-A medida que avanzaba la noche, la tensión entre ellos se hacía cada vez más espesa. Ambos deseaban que el otro diera el primer paso, rompiera el hielo y finalmente se dijera cómo se sentían. Pero ninguno de los dos sabía cómo, y la velada llegó a su fin sin ninguna revelación de sus verdaderos sentimientos-
-Cuando se separaron, Hitler y Mussolini regresaron a sus propios deberes, cada uno lamentando en secreto la falta de coraje para actuar según la atracción que sentían el uno por el otro. Pero lo que no sabían era que su encuentro pondría en marcha una serie de acontecimientos que cambiarían el curso de la historia para siempre-
-Mientras seguían hablando, Hitler empezó a discutir sus planes para el futuro de Alemania. Habló de crear un ejército más fuerte, un gobierno más unificado y una economía más estable. Confiaba en que, con su liderazgo, Alemania se convertiría en la nación más poderosa del mundo-
-Mussolini escuchó atentamente, asintiendo con cada palabra de Hitler. Quedó impresionado por la visión y determinación de Hitler-
"Parece que hay mucho que podemos aprender unos de otros, señor Hitler"
-dijo-
"Eso es lo que esperaba"
-respondió Hitler, sonriendo-
"He estado estudiando el propio ascenso de Italia al poder y creo que juntos, nuestros países podrían convertirse en las fuerzas dominantes en Europa"
-Mussolini asintió con la cabeza-
"Con usted liderando Alemania y yo liderando Italia, podríamos crear una alianza imparable. El mundo tendrá que tomarnos en serio"
-Hitler sonrió, sintiendo una sensación de excitación. Nunca había conocido a nadie tan ambicioso y decidido como Mussolini, y sabía que juntos podrían lograr grandes cosas. Mientras hablaban, los dos hombres continuaron conspirando y planificando, y sus objetivos compartidos dieron forma al futuro de Europa y el mundo-
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°• "Amor Dictorial" •° (Mussolini X Hitler)
Roman d'amourhistoria de amor entre dos dictadores