• Todo Por Una Fiesta De Año Nuevo • |SooJun|

Capítulo 2

— Mi nombre es Choi Yeonjun, y bueno, estoy más aburrido de lo que parece a preimera vista, estoy cansado y mi amigo me dejó porque tenía una cita con el chico que le gusta — decía el chico, sonriendo y hacía un pucherito...

— No me creerías si te dijera que lo mismo ocurrió con mi amigo, se fue con el chico que le gusta, y por cierto, un gusto conocerte, Junnie, mi nombre es Choi Soobin — dijo el chico, soltando una risita...

Ambos chicos empezaban a ignorar el ruido de la música solo para oír las palabras de su contrario, que a oídos de ambos chicos parecían dulce melodías, estaban un tanto perdidos en la conversación que no supieron cómo y cuándo fue que el reloj marcó las 00:00 horas, que indicaba el inicio de un nuevo año, un año que prometía ser mejor que cualquier otro...

— ¿Alguna vez has leído ese cuento que se llama "El engendro"? Pues es sobre año nuevo, y tal parecía que el año nuevo sería mejor pero no era así, físicamente el año nuevo se veía peor que antes... ¿hay algo que defina un buen o mal año? — decía Yeonjun, sonriendo...

Soobin quedaba algo sorprendido ante los conocimientos de literatura y libros que tenía el chico, no parecía aburrido, en realidad sentía que era muy interesante, a diferencia de los demás chicos que decían siempre que buscaban ser los mejores en todo, Yeonjun no pensaba aquello...

— No quiero ser el mejor en lo que hago, si bien es cierto que doy todo de mí cuando me lo propongo, prefiero ser único y llegar a la cima más alta, para cumplir mis sueños — decía Yeonjun, perdido entre sus palabras...

Yeonjun se sentía cómodo, ni su ex lo escuchaba con tal atención, se sentía extraño, en menos de lo que lo había conocido, sentía una confianza única, confianza de mostrarse tal y como era, sin miedo, podía sentir la mirada del chico sobre él, cosa que hacía que sus mejillas ardieran, su corazón de aceleraba ante tal gesto...

Soobin, por su parte, tomó la valentía de tomar la mano del chico y salir que aquella casa, solo para dirigida al jardín, era un ambiente grande, y prefería estar allí afuera con el chico... Solo ellos dos bajo la luna llena y las estrellas, los únicos testigos que ellos estaban allí...

Yeonjun casi de forma inconsciente fue corriendo, tomando la mano de Soobin hasta aquellos bancos que tenía el gran jardín, que parecía un parque, al llegar allí, se sentaron y Yeonjun se acurrucó al lado del chico...

— Las estrellas son muy lindas en esta noche, y mejor aún si se ven reflejadas en tus ojitos — dijo Soobin, sonriendo de forma tierna...

El chico que lo acompañaba estaba nervioso y tímido, no recordaba nunca haber tenido tal tranquilidad en compañía, haberse sentido... ¿amado realmente? Era mucho para juzgar, no debía de comparar con el antes, y ahora el año pasado, pero... Se sentía más que feliz, quizá esas primeras risas que marcaban el inicio del año, indicaban que un gran año empezaba simplemente...

— Yo solo puedo ver una estrella... Pero me siento algo extraño cuando la miro... — decía Yeonjun, mirando de reojo al chico a su lado...

— Entre tantas... ¿tú solo ves a una? — decía Soobin, divertido...

— Sí, solo veo a una que a primera vista no es como la demás... Por eso me siento como nunca antes me sentí — dijo Yeonjun, suspirando...

— Tengo cierta curiosidad por saber qué sientes al ver esa estrella — dijo Soobin, dirigiendo su vista al chico...

— Me siento como si estuviera enamorado, acabo de verla, pero... Me siento así, algo perdido por ella, mis ojos en esta noche solo pueden ver una estrella y no puedo dejar de sentirme enamorado — dijo Yeonjun, sonriendo...

Quizá no quería ilusionarse tan pronto, apenas se conocían unos minutos, bueno, algunas horas, pero ya sentían una conexión especial, que los unía más allá que un cruce de miradas, los ojos son la ventana del alma, y reflejan lo más sincero de la persona...

— ¿Debería de preocuparme que me guste esa estrella? Siento que esa estrella será fugaz, y que probablemente, mañana, llegada la noche... No volveré a verla y sufriré — decía Yeonjun, con un tono melancólico en su voz...

Yeonjun tenía miedo, de haberse ilusionado con Soobin aún sabiendo que solo aquella noche estarían juntos, ¿y si sufría al no volver a verlo o saber de él? No quería sufrir, quizá por eso tenía cierto rechazo al sentimiento de amar, porque si bien era cierto que sentía un tipo de conexión con Soobin, él no podía sanar tan pronto después de una infidelidad, ya que por su cabeza solo pasaban recuerdos y preguntas como "¿No fui suficiente? ¿Hice algo mal?" y temía que lo volviesen a lastimar...

— Yo no puedo ver las estrellas directamente... — dijo Soobin, con su mirada sobre el chico...

Yeonjun dirigió su mirada hacia él, de forma tierna y sonrió con curiosidad...

— ¿Por qué? — dijo Yeonjun con cierta curiosidad en su voz...

— Porque yo solo veo las estrellas que se reflejan en tus ojos, brillan más, me gusta ver ese brillo — dijo Soobin, tomando la mano del chico...

Definitivamente Yeonjun se sentía en una clase de sueño, como si en realidad se tratase de un pasaje onírico...

— ¿Sabes que quizá esta sea la primera y última vez que nos veamos? — dijo Yeonjun, algo cabizbajo...

Las manos de Soobin se dirigieron a las manillas del chico, dejando caricias tiernas...

— Por más que sea eso, prefiero vivir el momento, enamorarnos por más que sea por una noche, pero si el destino nos unió en un lugar como este, lo más probable es que fue porque nos quiere juntos... — dijo Soobin, algo sonrojado...

Yeonjun ya estaba sonrojado y su corazón latía más que rápido, emocionado...

Así pasaron las horas, la fiesta no acababa, sin embargo Soobin estuvo dispuesto a acompañar hasta su casa a Yeonjun, y así lo hizo ya que el chico no se negó, todo el camino fueron tomados de la mano, como si fuesen una pareja, y al llegar a la casa del chico zorrito, se despidieron con un tierno besito en la mejilla, Soobin se fue a su casa después de ello...