||ToneHina|| Mirando La Luna Desde La Colina ||ToneHina||

¿Nos conocemos?

Konoha luce resplandeciente, tan bello y alegre
Los niños juegan y corren, los adultos trabajan y ayudan en la construcción, reparando algunos daños que la guerra había causado y cada día las calles lucen más relucientes, las coloridas luces por la noche y lugares lindos para visitar.

Todos en Konoha estaban felices, se sentian tan despreocupados después de todo lo que pasó.
Los amigos de Naruto disfrutaban más tiempo con su familia y amigos, salían sin preocuparse de que los llamarían para una misión terrible.

Naruto era feliz, a veces era profesor para los niños de konoha, se volvió muy popular entre las personas y más por las chicas, siempre recibía obsequios de sus admiradoras y muchas personas de aldeas muy lejanas lo visitaban para tener una fotografía con él.

La joven Hinata se sentía libre y relajada, la relación que tenía con su padre, poco a poco iba mejorando... o eso es lo que ella estaba pensando
Aunque... Últimamente no lo había visto, parecía estar ausente, estresado y... Preocupado
Algo que hacía pensar todas las noches a Hinata

Después de la guerra Hinata se sentía mucho más fuerte, con más valentía. Tenía la fuerza suficiente para poder declarle su amor a aquel joven que había amado desde niños.

Pensando en aquel rubio tejia una bufanda, tejida con hilos rojos, hilos brillantes y preciosos, una bufanda que le traía muchos recuerdos. Cada atardecer tejía la bufanda y finalizaba cuando llegaba la noche, era un pequeño obsequio para aquel rubio llamado Naruto

- Últimamente la luna luce hermosa, es tan brillante y... Demasiado grande... Podría caminar hacia ella y pensar que podría alcanzarla - Mencionaba Hinata mientras bebía del té que tenía en sus manos y observaba la ventana que estaba en el salón de su casa.

- Señorita Hinata Hyuga, será mejor que descanse, es demasiado tarde - Mencionaba uno de los sirvientes de la casa Hyuga

- Gracias por preocuparte, tienes noticias de mi padre, hace días que salió de konoha para una reunión importante, no he tenido noticias de él - Mencionó Hinata, mostrando una sonrisa tan cálida y amable

- P-por el momento no, no hemos tenido noticias, lo único que sabemos es que regresara en 3 días - Mencionaba el joven, con un tono nervioso pues sabía que detrás de esa reunión algo que posibleme cambiaría la vida de la princesa Hinata vendría.

... . .. . ... Con Hiashi . ... . ... . ....

La noche era hermosa y la luna iluminaba todo el campo, era tan brillante junto con las nubes. Pero del lado de Hiashi todo era denso, la noche era pesada y llena de energía negativa. La luna era malvada, la luna estaba enojada

Hiashi junto con sus ninjas guardaespaldas se encontraban parados frente una roca, la cual formaba un ojo. Mantenían una posición firme y relajada pero tambien alerta. Escuchando las palabras de un joven albino que se encontraba parado frente a ellos.

Aquel joven, un muchacho alto de cuerpo esbelto, con cabello fino y plateado, vestia con ropa elegante con un kimono de tela fina parecía de gran valor, con una piel blanca tan pálida. Era como la luna era hermoso y emanaba un gran poder a pesar de verse tan relajado. Aquel joven fue quien propuso una pequeña reunión con Hiashi Hyuga el líder del clan

- Este es un decreto, un decreto celestial que se le otorga al clan Hyuga, así que te lo preguntaré y quiero tu respuesta Hiashi Hyuga - Lo decía aquel Joven, con voz firme y rostro serio

- Tu respuesta decidirá el futuro de todo tu clan Hyuga

- Esta es la respuesta de Hyuga

Hiashi respondió con tono enojado, y rápidamente se dirigió hacia el albino, activando su byakugan para atacarlo