un problema entre sonrisas

06

Alana
Buenos Aires, Argentina | Jueves, 8:30 A.M, 24 / 12 / 2023

Eran las 8 de la mañana, estaba muriendo del sueño, tenía que comprar las cosas para el amigo invisible que organizamos todos los años, para mi buena suerte mi amigo invisible es benja, y lo conozco más que a nadie, pero para mi mala suerte tengo que pasar navidad con la familia de mi mamá, o sea que algunos miembros de la familia preguntarian por mi novio (inexistente) Entonces no quería estar ahí, solo estaba ahí por dos simples razones, no quería que benja se sienta solo y desde que falleció el abuelo venia pasando todas las navidades y año nuevo con papá, no podía soportar ver que alguien más ocupaba el lugar que era de mi dieguito... mi abuelo, y como olvidar que desde que el abuelo no está más presente mis tíos se creen los dueños del mundo, cosa que detesto, y por otra parte si juego al fútbol con benja toda la familia me diría que me quedé quieta, ya que no están a favor de que siga mis sueños, ya que piensan que el fútbol es solo de hombres y la mujer que lo juegue es un macho más.
había intentado mil y un formas de no asistir a esa cena, pero siempre obtenía la misma respuesta, o sea, no, papá dijo que tenía que convivir con mi familia materna, pero que si quería podía ir a casa, ya sabia que mi mamá lo había obligado a decir eso, pero me hice la boluda.
eran las 12 del mediodía, yo estaba en el shopping comprando las cosas para benja y un poco de ropa para mi, obviamente benja me acompaño, así que tuve que disimular mucho, habíamos ido a mostaza a comer y después nos tomamos un helado, y estuvimos por todo el shopping hasta las 7 de la tarde, no solo comprando cosas, también sacandonos fotos con la gente, dando autógrafos, etc.

●●●

Ya estábamos en casa, para ser exactos la ex casa del abuelo, ahora casa de mi mamá, eran las 9 de la noche y ya estaba toda la familia ahí, estaban todos hablando de los más normal mientra benja y yo mirábamos a "davo xeneizee" en mi teléfono, y en el único momento que saco la vista de mi teléfono para agarrar mi vaso de agua me viene la pregunta que menos esperaba pero al mismo tiempo la venia venir:

– Alana como te va en el fútbol? sigo sin creer que con lo mal que jugas puedas vivir de eso, y más siendo mujer –dijo mi tía dalma, esa mujer siempre hablaba demás, y me hizo doler lo que dijo–

– Bien, me va bien tía. Con permiso voy al baño –dije intentando ocultar el nudo en la garganta que tenia y me levante en seco para ir corriendo al baño–

una vez en el baño logré escuchar como por primera vez desde que tengo más de 16 años mamá me defendía, ahí pude notar que cambio su forma de pensar, algo que no le creía a benja. mientras me lavaba la cara escuché a alguien tocar la puerta.

– ¿quien es? –dije algo bajo pero se lograba escuchar–

– benja, ¿puedo pasar? –dijo mi hermano, al pedo me pregunto por que ya tenia un pie adentro– ¿que paso ala?

– n-no se benja, creo que me toco donde más me duele... ¿de verdad juego mal? –dije con las lagrimas amenazando a salir–

– no Ala. ¿como vas a pensar eso? nunca vi a una mujer jugar como vos, la tía dalma no acepta que te esta yendo bien, eso es lo que pasa, pero si te sentis mal le avisamos a papá –dijo benja con una sonrisa y acto seguido me abrazo, y mis lágrimas no se contuvierón, correspondí su abrazo mientras lloraba a acentia con la cabeza– Vamos al patio así tomas aire

solo asentí con mi cabeza, me lave la cara y fuimos afuera, mamá nos vio salir y nos siguió, lo primero que hizo fue abrazarme abrazo el cual correspondí. no mienten cuando dicen que los abrazos de las madres/padres son los mejores.

– Perdón por arruinar la navidad así ma, pero no puedo estar acá, todo me recuerda al abuelo y... no quiero estar en la misma mesa con alguien que me dijo cosas hirientes –dije sin soltarme de su abrazo al cual se había sumado benja–

ella solo asintió con una sonrisa, yo llame a mi papá y le dije junto a benja que nos benja a buscar y en menos de 5 minutos papá estaba ahí esperándonos, nos despedimos de mamá y subimos al auto, benja le explicó lo que paso mientras yo veía por la ventana. cuando llegamos a casa habían bastantes personas de la selección, en realidad solo la familia de di maria, la familia de otamendi, la familia de messi y la familia de el dibu. llegamos y se sintió un aire distinto, un aire alegre, cenamos entre risas y anécdotas, los niños abrieron sus regalos, incluyéndonos a mi y a benja que lo abrimos con la misma ilusión que los pequeños de 4 u 5 y llegó mi momento favorito, la entrega del amigo invisible, y ahí me tocaba describir a benja para que adivine que era el, pero el primero en pasar fue mi papá, ya que siempre era por orden alfabético de los apellidos, pero primero van los adultos y luego los niños.

– La persona que me toco es alguien que se come a todos... que lo odia todo el mundo menos el pueblo argentino y es alguien muy polémico –dijo mi papá, ya todos sabían quien era, el dibu se levantó y recibió su obsequió, para luego abrirlo, le regalo una camiseta de independiente–

– Gracias kun, esta re piola –se la probó y se sentó, luego se levando di maria–

– La persona que me toco es el mejor jugador de la historia, es mi capitán y mi mejor amigo –se levantó Leo messi y todos aplaudimos como hicimos con mi papá y el dibu‐

el fideo le regalo unos botines y una remera básica, ahora era el turno de messi

– la persona que me toco es muy boludo, pero lo quiero demasiado por que me hizo padrino, y se la pasa jugando a la play –se levantó mi papá y todos aplaudimos, messi le regalo una réplica exacta de un balón de oro–

después paso el resto con regalos espectaculares y llego mi turno.

– bueno, mi regalo es para una persona muy especial para mi, siempre está para mi y no se que haría sin él, sin duda es un ángel caído del cielo y a pesar de la distancia siempre está presente –benja se levantó y le di su regalo, una pelota adidas y una camiseta firmada por el mejor boca de todos los tiempos, el boca de bianchi–

nos abrazamos y después el se levantó a dar su obsequió, sorpresivamente era para mí, me regalo una camiseta que usaba mi abuelo y un cuadro con una foto de el, mi abuelo y yo en la cancha de boca, ambos eramos super chiquitos, benja tenia unos 4 años y yo unos 8 años, lo abrace y llore de la emoción. luego lo solte y volví a mi lugar.

★
★ ★

helloooo, ¿les gusto este cap? a mi me re gustó, y me emocióne escribiendo, los amooo

atte: Vickyy