🖤💊 Psicologia Amistosa 💙🩹

Capítulo 2: Primeras impresiones

Narradora:

El día había llegado, era Sábado y eso significaba una sola cosa: Ir al campamento y Zero no estaba lista, le daba cierta emoción de ir por primera vez a un campamento pero a la vez tenia miedo de estar sola con un montón de gente que no conocía y tener que convivir con esa gente, pero ya no había vuelta atrás, había echo su elección.

Ese mismo Sábado mi familia me dejo en la parada de autobús, se despidieron de mi y el autobús partió al campamento, me sente en un sillón del fondo pegada a al ventana, saque de mi mochila mis audífonos para escuchar música e intentar desestresar me y no sentirme tan nerviosa aunque sentia como si todos me observaran, sentía las miradas intensas clavarse en mi como finas agujas llegando a mis vasos sanguíneos, observando cada detalle mio, solo me puse más nerviosa provocando que mi estómago doliera.

El autobús paro en el estacionamiento del campamento mientras otro llegaba, después todo mundo bajo para que Luna quien era una orientadora del lugar nos organizará para poder escuchar las indicaciones y darnos un breve recorrido, rato después Luna nos volvió a llamar para decirnos que cabaña nos tocaba para quedarnos.

En mi caso me toco la cabaña 5, eran cabañas de 2 pisos lo cual las hacía ver genial aunque algo inestables, me otorgaron la llave y me fui con mis maletas para poder instalarme, pero al momento de entrar vi a otras dos y un chico chicas quien se miraron confundidas y la verdad yo también, aunque me di cuenta que estaba la chica de pelo rosado que vi el dia de la inscripción lo cual solo hizo que me ponga más nerviosa, deseando que me tragara la tierra.

-... Ehhhh, hola? -comente algo nerviosa, por que rayos estaban esas chicas aqui?

- Quien diablos eres y que haces en mi cabaña? -dijo una de los chicos,quien era un lobo de pelaje blanco con algunos toques de azul, aunque tenía cara y voz ligeramente de mujer.

- Espera espera espera! Tu cabaña? Yo llegue primero asi que es mi cabaña! - comentó otra chica quien era algo pequeña con cabello café oscuro y algo notable eran sus seis dedos lo cual se me hizo algo interesante.

- De que hablan idiotas? Yo estuve aquí primero incluso en la inscripción asi que todas ustedes se largan! - menciono la tercera chica quien era la que vi el día de mi inscripción, la de pelo salmón.

- Yo también estuve mucho antes asi que más bien ustedes se me van! - dije mostrando cierto enojo ante la situación.

- Tu que maldita escuincla! Tu llegaste tarde fenómeno! - esas palabras me hicieron enfurecer aun más.

- Como me dijiste maldita? - me acerque lentamente y de forma amenazante a este.

- Fenómeno asi como escuchas, oh! Lo siento olvide que la radiación había afectado tu audición -

- Fenómeno tu maldito maricon, se nota que no pudiste pagar el cambio de geniales -

- Ahora si hijo de tu santa madre! - dijo furioso abalanzado se sobre mi y tirando me al piso. Ese chico era fuerte, muy fuerte, sentí como ahorcaba mi cuello apretando cada tejido impidiendo que respirara, solo podía dar patadas al aire en busca de libertad.

Las otras chicas trataron de detener al lobo al ver como la situación se tronaba peligrosa pero esto provocó que el chico estrellara mi cara contra la pared, haciéndome sangrar, las otras chicas empezaron a pelear entre si dándose golpes y en un punto todos peleábamos contra todos, tirando nos del cabello, dando mordidas profundas y golpes hasta que llego la Sra. Cara quien abrió la puerta y al vernos pelear nos detuvo con su fuerte voz.

Fuimos llevadas a la clínica del campamento donde nos dieron atención médica ya que estábamos muy lastimadas y sangrando, por suerte no hubieron daños mayores solo golpes y sangrado, pero eso no nos salvo de ir a prefectura, un lugar donde si rompes las reglas o tienes problemas tienes que hacer tareas o actividades que te encarguen y claramente eso fue lo que nos pusieron a hacer, tuvimos que recoger la basura y limpiar el patio de juegos el cual estaba en sus peores condiciones, parecía un lugar abandonado.

- No puedo creer que nos pusieran a hacer esto - se quejo el compañero lobo mientras barría el piso.

- Enserio te quejas? Fue tu culpa que termináramos asi! - mencioné moleta señalando lo con mis dos brazos extra.

- Cállate que tu le seguiste el juego! Asi que es culpa de los dos y punto! - nos grito molesta la pelo salmón - Ahora sigan limpiando si no quieren quedarse aquí hasta noche - siguió tallando fuerte las paredes pintadas de grafitis y tenía razón, fue también mi culpa terminara así ya que yo decidí atacará también.

Asi estuvimos un buen rato hasta la tarde tallando y barriendo aquel lugar sucio y al terminara fuimos a asearnos ya que quedamos sudadas y manchadas, oh y si, nuevamente nos peleamos aunque solo fueron empujones y tiradas del pelo por ver quien se bañaba primero ya que los últimos les termina saliendo agua fría, me toco ser de las últimas asi que no solo me toco agua fría sino que también me dejaron en la cabaña ya que iríamos afuera a cenar con otros compañeros como bienvenida, pero el problema fue que me dejaron encerrada y se llevaron mis llaves por lo que casi me quedo sin cena pero me las ingenie para escapar por la ventana dle segundo piso aunque que di un buen golpe.

Termine saliendo enojada y les arrebate mis llaves, estuve apunto de volver a pelearme con las chicas pero nos sentaron a todos.

- Okey chicos y chicas quisiera dar un brindis! - menciono emocionada Luna la orientadora - Es un placer y un gusto tenerlos aquí! Quiero recordarles que aquí venimos a convivir y a estar en paz junto con nuestros compañeros! -

- Asi es, por lo cual espero no tener problemas con ningún grupo y mucho menos etse primer día de acuerdo? - dijo la Sra. Cara tirando una mirada asesina a nosotras.

- Si señorita Cara - respondieron todos los residentes mientras nos miraban con intriga, yo solo podía ocultarme con mi capucha y desear escapar de ahí.

Terminé cansada, avergonzada y fastidiada después de la cena asi que lo primero que hice la llegar a la cabaña fue cambiarme a mi pijama y acostarme en mi cama a dormir, la fatiga era mucha, sentía mis ojos arder con ganas de soltar los mares que guardaba, pero como una vez me dijo mi madre: "La vida no se trata de llorar", aunque aveces esas plantas me duelen hasta el pecho, como is una estaca se clara en mi... No dimos buenas impresiones.

Continuará...
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