normal - jeon jungkook

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Kate y yo nos propusimos viajar a Corea del Sur por nuestros bias, Taehyung y Jungkook. Dos años esperamos para lograr juntar el dinero para costear todo el viaje, las dos semanas que nos quedaríamos, los lugares a los cuales iríamos, los restaurantes, los bares que rondaríamos para conocer gente y lo más importante, los días que visitaríamos los lanzamientos de los discos y algunos conciertos que harían nuestros cantantes.

Todo estaba planeado a la perfección, nos alegramos que dentro del ajetreo que conlleva realizar un viaje lejos de nuestra casa las cosas estuvieran siguiendo el camino correcto. Dentro de todo nuestro amor por BTS y nuestro esfuerzo para hacer el viaje antes de que todos se fueran al servicio militar no funcionó. Nos alegramos por poder conocer a nuestros bias, pero nos apenamos por un imprevisto que hasta ahora no sabemos qué lo provocó, no lo logramos.

(principios del 2022)

Estábamos emocionadas por empezar a pagar algunos tours que queríamos realizar en nuestra llegada a Corea. El que más nos importaba era el que recorría espacios emblemáticos de BTS, el museo HYBE, Star Gallery, Gangnam, BTS21 Line Store, el Restaurante Yoojung Shikdan y el que nos encantaría más, el recorrido por Hannam The Hills, en donde vivían nuestros bias, recorreríamos los espacios donde vivieron juntos. Eso si, de lo que nos preocupamos es que fueran tours respetuosos, en donde no se juntaran muchas personas, para así no invadir un espacio público y también muy reconocido por las fans.

Meses antes de planear estos tours conocimos a Sara, también era fanática de los chicos, le encantaba V y JK, a lo cual se nos hizo mucho más fácil comenzar una amistad. Tener amigas en el mundo del kpop y de las ARMYs era muy lindo, sobre todo para nosotras, ya que encontrábamos un espacio seguro cuando hablábamos de los chicos. Sara comentaba mucho las ganas de ir a Corea del Sur, ya que ese es el sueño de toda fanática, ir al país en el que se creó tu grupo favorito. Le hacía mucha ilusión ver los espacios en donde se podían ver cosas relacionadas a BTS.

- ¿Se imaginan estar al frente de la casa de los chicos? es como un sueño, necesito que pase, quiero verlos - nos manifestaba Sara.

- La verdad si sería lindo, pero nosotras planeamos ver a los chicos en espacios más comunes, lugares en donde ellos se sientan seguros, como alguna entrevista o programa, quizás incluso nos topemos con algún concierto, no lo sabemos todavía - le dije

- De hecho, vamos a comprar un tour personalizado, para ir a esos barrios lujosos y nos preocupamos que sean respetuosos con las viviendas de los chicos, estamos muy emocionadas - Kate dirigiéndose hacia mi.

- ¿Y les saldría mucho dinero? - nos pregunta Sara

- Como unos 400 dólares, ya que vamos a recorrer muchos lugares - le responde Kate - a parte pensábamos a ir a recorrer más lugares que no sean relacionados a los chicos

- Si, como las ciudades en donde grabaron algunos k-dramas o restaurantes, museos, no sé varias cosas - agregué a la conversación

A pesar de estar tan seguras con el contacto del tour, es aquí en donde comienza el imprevisto que nos hace retrasar todo el viaje. Al momento de pagar el tour más importante, nos hackearon la transacción, una importante suma dentro del viaje, nos provocó mucha pena y dolor, pero no nos quedamos con la resignación, si era nuestro sueño, era necesario cumplirlo a pesar de lo que había pasado. No comprendíamos porqué había pasado, hicimos reclamos, llamamos a la policía, pero lo único que nos aseguraron que el pago no había sido efectuado, incluso sabiendo y que teníamos pruebas de que el dinero destinado al tour no estaba en nuestra cuenta bancaria.

(principios de noviembre del 2023)

La nueva integrante era Sara en nuestro plan a Corea, desde que la conocimos le interesó mucho el viaje y cuando pasó todo, ella nos reconfortó y nos dijo que quizás era para otro momento, pero que no nos desesperáramos, que los sueños si se cumplen. Ella también quería intentar ir con nosotras y su adición al viaje nos ayudó mucho a organizar todo, tenía contactos con fans de nuestra ciudad que ya habían ido a Corea y desde sus contactos pudimos pagar todo de forma segura y con personas de confianza.

Era emocionante pensar que haríamos un viaje todas juntas, es como un sueño de película ir a otro país con tus amigas. Estábamos ansiosas por querer irnos y conocer un país nuevo, Kate y yo nunca habíamos salido del país. En cambio, Sara si había salido y nos dimos cuenta el día en que estábamos en el aeropuerto, tenía un pasaporte con varias hojas timbradas:

- ¿Por qué tienes tantas hojas timbradas? - le pregunté porque la vi entregando el pasaporte a la señora que timbraba las hojitas

- Con mis papás viajábamos mucho, por distintos lados desde que era muy pequeña, - responde un poco nerviosa mientras esperaba que le devolvieran el pasaporte - México, EEUU, Republica Dominicana, Argentina y también vuelos nacionales, esto lo tengo desde como el 2016, es como recolectar recuerdos

Le entregan su pasaporte y trato de acercarme para verlo más detalladamente, cuando alguien me interrumpe a la mitad de lo que estaba por hacer:

- Señorita, me entrega su pasaporte - me pide la persona que estaba al lado de Sara a lo que me distraigo

- Si, claro - le respondí para luego preocuparme de lo que tenía que hacer después.

Dentro del avión nos esperaban 38 horas de viaje, de alguna u otra forma teníamos que entretenernos o dormirnos y al estar tan bien preparadas, planeamos hasta juegos, películas, skin care routine, pastillas para dormir, entre otras cosas.

Un vuelo significó una experiencia llena de cosas que no pensábamos que iban a ocurrir y otras demasiado inesperadas.