Uraraka es una bajista de una banda indie popular en su ciudad que suelen presentarse en varios restaurantes, ferias y festivales locales de música en vivo.
Durante una tocada en un bar reconocido y popular por los estudiantes universitarios, Urarak...
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Sus piernas se dirigían hacia una mesa libre dentro de ese bar, su respiración estaba un poco agitada gracias a los esfuerzos que hizo para poder llegar a tiempo. La música inundaba sus oídos así como el bullicio de las demás personas que le rodeaban.
No solía salir de su pequeño y solitario departamento a menos de que fuera a comprar la despensa de la semana o para hacer alguna tarea o trabajo que amerite salir, sin embargo, era su primera semana de vacaciones y Bakugo tenía un concierto junto a su pequeña banda. No le gustaban los espacios tan ruidosos y tan caóticos como ese bar donde solo iban personas de su edad o cercana a esta, pero el cariño que le tenía al chico de cabello cenizo era más grande, por lo que después de dejar a su dulce madre a su trabajo decidió ir a ese bar a escuchar a la banda que Bakugo y sus amigos tenían.
De sus labios salió un suspiro pesado, quería mucho a Katsuki y lo admiraba, pero se estaba arrepintiendo de haber decidido ir a ver el debut de Shōhei, pero para nada podía perderse un momento tan especial para su hermano y mucho menos tomando en cuenta todo el esfuerzo que cada uno de los integrantes tuvo que dar para lograr dar un pequeño pero tan significativo paso.
Cuánto hubiese deseado que el lugar fuese más tranquilo para disfrutar del pequeño concierto.
Pero eso no quita el hecho de que haya llegado demasiado tarde y solo pudo ver quince minutos de la hora en la que Shōhei estaba en el escenario, lo cual lo desánimo un poco.
- ¿Qué te pareció, nerd? -
La voz gruesa de su hermano retumbó en sus oídos, pudo ver cómo los cinco integrantes se sentaban a su lado, después de la pregunta formulada Shoto y Mina lo miraron con una evidente curiosidad y emoción, mientras Sero y Jirou miraban la carta para pedir algo para comer. Una pequeña sonrisa apareció en el rostro del omega.
- Me gustó mucho, al menos las últimas canciones que fue las que pude escuchar me gustaron bastante - Una risita nerviosa salió de sus labios.
- ¡Midoriya, pero sabías a qué hora empezaba el concierto! - Exclamó la chica con aroma a chicle, el omega miró a la alfa de cabello rosado con ojos culpables y arrepentidos.
- Lo siento... enserio lo siento, pero había bastante tráfico y tuve que llevar a mi mamá a su trabajo, ¡en serio lo siento!, prometo que lo compensaré -
- No importa, Midoriya, al menos pudiste escuchar las últimas canciones - La voz calmada del único omega de Shōhei hizo acto de presencia, así como feromonas calmantes las cuales tenían un agradable aroma a menta.
- El cabello mitad mitad tiene razón, es bueno que hayas llegado aunque sea para escuchar las últimas canciones - El rubio cenizo se encogió de hombros, se encontraba inusualmente calmado, tal vez gracias a las feromonas calmantes de Todoroki.
- Aún sigo pensando que sería bueno tenerte en la banda, sería bueno tener un corista que sepa cantar - Bromeó la chica beta de cabellos púrpura con una sonrisa juguetona.
