Advertencias:
-Incesto.
-Lemon.
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Eran aproximadamente las nueve con treinta y dos minutos de la mañana cuando Taehyung finalmente llegó a casa; en definitiva los efectos de la noche anterior empezaban a pesarle, y bastante. Al menos sabía que no debía preocuparse por sus padres, ambos habían salido en su llamado viaje de negocios, aunque tanto él como su hermano pequeño podían asegurar que simplemente habían decidido vacacionar sin sus dos queridos hijos. Podían joderse.
Entró a la casa sin siquiera molestarse en hacer silencio, aunque era probable que Jungkook aún estuviese durmiendo; no podía importarle menos. Subió las escaleras con pesadez, podía sentir cómo su cerebro martilleaba con cada jodido sonido de la madera crujiendo, aquel era un indicio de lo pésimo que sería su día, y estaba a punto de cumplir su objetivo: llegar a su habitación para tirarse en la cama a dormir como una morsa durante el resto del día, quizá de la semana; sin embargo extraños ruidos procedentes de la habitación continua a la propia hicieron que se detuviera.
Ahora sí estaba siendo cuidadoso con cualquier indicio de presencia que fuese capaz de emitir, no quería alertar a Jungkook; lentamente acercó su cabeza de forma lateral a la puerta de madera, prestando suma atención a lo que se escuchaba dentro. Podía percibir con extrema claridad el rechinar del antiguo escritorio de su hermano, y ¿Eran esos gemidos? No pudo más y sin parsimonia alguna abrió la puerta de golpe, encontrando a su "inocente" hermano en pleno acto coital con la chica de largo cabello castaño que se hacía llamar su mejor amiga.
-¿Cassie? -Vociferó Taehyung, con los ojos tan abiertos que cualquiera pudo decir que estaban a punto de salirse de sus órbitas. Mientras la joven lo observaba completamente anonadada ante la situación, el menor de todos ahí se separó de la mayor a una velocidad increíble, empezando a vestirse nuevamente, con las mejillas visiblemente rojas. -¿Para eso querías ser mi mejor amiga? -Cuestionó V, recuperando un poco la compostura mientras jugaba con el piercing que yacía en la comisura izquierda de sus labios, al parecer se lo había hecho durante la noche pues aún dolía, minúsculamente pero dolía; de igual forma no lo recordaba, ya luego le preguntaría a Hoseok, ahora tenía otros asuntos ligeramente más importantes que responder. -¿Para acostarte con mi hermanito? Anda Cassie, creí que eras mejor que eso.
-V, no es lo que cre...
El castaño llevó el índice a sus propios labios, no queriendo escuchar nada más de aquella a quien consideraba su amiga. Simplemente señaló la puerta de madera, ahora abierta; sin más la joven recogió sus cosas, y ya con la ropa puesta se encaminó hacia fuera.
En aquel momento el silencio se hizo extremadamente incómodo, al menos hasta que ambos parientes escucharon el sonido de la puerta principal cerrarse, fue entonces cuando V giró sobre sus propios talones y con paso seguro se dirigió a su habitación, obviando completamente a su hermano menor, quien lo observaba sin saber qué decir.
Pocos segundos pasaron antes que el pelinegro saliese de su temporal estado de shock, siguiendo con pasos rápidos a su hermano, quien ya estaba prácticamente en su dormitorio.
-¡Taehyung! -Exclamó con la respiración entrecortada; bien sabía él cuán importante era su hermano mayor para sí, y no quería que éste se llevara una impresión equivocada, mucho menos teniendo en cuenta la razón por la que estaba acostándose con Cassie.
-¿Qué quieres, Jeongguk? -Mal augurio. V solamente solía llamarle por su nombre cuando estaba realmente enfadado. El mayor se encontraba ahora sentado frente a su escritorio, leyendo un cómic con fingido interés. -Estoy ocupado.
