"¿Puedo preguntarte algo?..."
Hizo eco en la habitación aquella suave,tranquila y maternal voz.Mientras caminaba con delicadeza,temiendo despertar a sus superiores;todo el camino en busca de su "hermano mayor" había sido una tortura.Cuanto rogaba por un "sí ", que le concedieran un descanso después de semanas sin comer en su horario,ser atormentada por la ansiedad, además de lidiar con el insomnio que provocó,y seguir cuidando a esas criaturitas tan molestas pese a todo, estando para ellos en cualquier momento para satisfacer cualquier capricho por más estúpido o complicado que fuera;su suave y brillante cabello rubio estaba totalmente descuidado,amarrado en una coleta baja con varios nudos en las puntas mientras que sus bellos ojos esmeralda habían perdido su chispa y ahora se veía demacrada en todo aspecto,ya no le importaban las bolsas negras debajo de sus ojos que la asemejaban a un mapache.De esa similitud nacieron varias burlas hacia su persona,algunos golpes y jalones a su pelaje,mejillas y orejas de parte de los niños que la veían como una mascota.La última vez que trató de defenderse mordió a uno de ellos,fue de manera involuntaria,ella solo trataba de alejarlos;algunas heridas eran recientes y apenas estaban por cicatrizar,y en cuanto volvieron a abrirlas fue tal el dolor que su primer reflejo fue atacarlos.
Esa fue la primera y amenzaron que sería la última vez que ella se mostraba hostil "sin razón",cuánto los odiaba y temía;siendo su mayor inspiración y motivación su "hermano mayor",de nombres variados pero el más común siendo "Tinky Winky".Era de pelaje púrpura rojizo con el cabello por encima de los hombros,esponjoso y más cuidado a comparación,ojos cristalinos con cierta deficiencia visual temprana,además de ser el más avanzado en el habla entre los prototipos de los que eran parte,alguien muy cercano a los humanos,considerados superiores a ellos.Llevándose de manera algo neutral con los que él llama "felinos",criaturas más pequeñas comparado a él o a su "hermana menor",pero de la misma "especie",alguien muy curioso,adentrándose varias veces en los sótanos del hospital más cercano,o cualquier lugar al que llegaran en busca de suministros tales como medicamentos,comida y demás,acompañando a los "militares" cada que tenía la oportunidad;aprendiendo varias direcciones y planteándose en investigar por su cuenta.
-¡Ey! Mi mapache rubio...que raro verte por aquí.
La recibió con un cálido abrazo en cuanto logró llegar a él, sentándola en su regazo,adoptando una posición más firme,bromeando con dejarla caer si se descuidaba,apoyándose en el marco de la única ventana que tenía e iluminaba esa habitación,que estaba detrás de ellos;era algo incómodo estar rodeado de literas y en ellas los cansados cuerpos de sus superiores.Ella rió aferrándose aún más a él,atascando sin querer el pelaje púrpura sobresaliente de su pecho en el cierre de su abrigo,reclamándole el apodo y atribuyendo su acción a su actitud.-Basta Tinky...
-¡Winky!-Algo distraído trató safarse.
-No es divertido...-Entre risas le reclamó,negándose a ayudarlo.
-¿Oh,de verdad?-Juntó sus frentes juguetón, chocando sus narices.Notando de inmediato su cansancio al verla directamente a los ojos,habían perdido su chispa.¿que sucedió ésta vez?
-Se quedó pensando unos segundos,tomando valor mientras de reojo los observaba alejando lentamente su cara.-Esas criaturas, son tan diminutas,groseras y molestas!...Había perdido el control del tono de su voz en un pequeño arrebato de ira,continuó quejándose,ignorándolo y sosteniendo su mano cuando intentó taparle la boca con la mano que tenía libre aparte de sostenerla para que no caiga de su regazo.
Se quedaron en silencio de repente.Unas pequeñas manchas de sangre adornaron las puntas de los dedos de la rubia quién temblando se petrificó ante la fría y amenazante mirada del humano.Clavaba sus uñas en la mano del mayor al tratar de aferrarse al único que la defendería sin dudar,sin mostrar aunque sea un poco de miedo.
-Buenas noches señor White.
Apretó los dientes por el dolor y mostró la mejor sonrisa que pudo,tratando de no mostrarse menos que él, llegando a ser arrogante de cierto modo.Sin decir mucho más, juzgándose el uno al otro aquel se retiró.
-Vamos,vamos mi mapache,ya se fue no llores...
"¿Cuando podremos irnos?..."