En la madrugada de un tranquilo hospital ubicado en la ciudad de Daegu se encontraban todos los doctores y enfermeros cumpliendo su deber en silencio de manera ordenada y extremadamente silenciosa. Cuando repentinamente las puertas se abrieron mostrando a una joven mujer que a gritos entro pidiendo ayuda.
–¡Mi amiga esta por dar a luz! ¡Alguien ayúdeme!
Una vieja enfermera se le acerco con una mueca de desconfianza al ver su aspecto; pelo corto y teñido con mechas azules y algunos tatuajes. Tenía todas las pintas de ser una delincuente, según la cabeza de la vieja enfermera.
–Cálmese...
–¿¡Calmarme?! -Grito histérica, su amiga estaba en su auto llorando y esta mujer lo único que le decía, ¡¿Era que se calmara?!- ¡Deja de mirarme como una maldita estúpida y llama a un doctor o algo, ya!
En ese momento, pudo reconocer entre todo el tumulto de doctores y enfermeros que venían del pasillo al doctor que acompañaba a su amiga en el embarazo. Lo había conocido cuando la acompaño en una de sus consultas.
–¿Qué es todo este escándalo?
La enfermera hizo el amague de hablar, pero la pelinegra se adelantó con voz un poco más calmada.
–Eun-yeong está en el auto, hace como diez minutos entro en labor de parto.
El hombre de bata abrió los ojos alarmado y ordeno que prepararan una silla de ruedas y que la trasladaran a una habitación ya mismo. Luego de unos minutos, Eun se encontraba acostada en una camilla donde el doctor de encargo de revisarla y hacerle algunas preguntas antes de alejarse diciendo algo sobre preparar el quirófano a unas enfermeras, cosa que puso de los nervios a la pelinegra. Tzuyu se acercó a la camilla en la que se encontraba su amiga y sosteniendo su mano le dio una temblorosa sonrisa, por más que quisiera evitarlos, sus nervios se veían desde lejos.
–Respira Eunnie, todo estará bien.
–Duele Tzuyu. -Se quejo bajito, apretando su mano- Duele mucho...
La mayor hizo una mueca y quito el pelo de su sudorosa frente en una suave caricia. Le dolía verla sufrir de esa manera, pero sabía que era un dolor inevitable que pronto pasaría para dar lugar a un momento muy feliz.
–Shh, recuerda que el dolor es momentáneo, después tendrás al pequeño Tae aquí, contigo Eunnie -Dijo con una sonrisa, su amiga y su pareja habían decidido llamar a su bebé Taehyung apenas se enteraron de que era un niño- Solo imagínalo, por fin podrás tenerlo en tus brazos,
La agitada castaña sonrió a duras penas con solo pensar que por fin tendría a su bebé en brazos después de tantos meses, el solo imaginarlo una enorme felicidad que superaba el dolor que sentía en esos instantes le llenaba el pecho.
Soltó un chillido de dolor y susto cuando un repentino dolor mucho más fuerte llego a su vientre, Tzuyu se levantó asustada y empezó a llamar angustiada al doctor, el cual vino corriendo alarmado.
–Es hora, Eun -Dijo el doctor luego de revisarla- ¿Estas segura de que no quieres la anestesia? Aun estas a tiempo...
Se tomo unos segundos para respirar y negó con la cabeza.
–No, no la quiero, solo si algo sale mal ustedes tienen permitido usarla.
El doctor asintió y volteo hacia las enfermeras empezándole a darles distintas instrucciones. Tzuyu se inclinó hacia su amiga y dejo un pequeño beso en su frente, mientras volvía a tomar su mano.
–Todo saldrá bien, yo estaré aquí esperando, te lo prometo...
–Gracias, pero... -Hizo una mueca al sentir otra contracción- ¿Dónde está Seo? ¿Le llamaste?
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⚠︎𝑺𝒆𝒓𝒑𝒆𝒏𝒕𝒔·𝑲𝒐𝒐𝒌𝑻𝒂𝒆⚠︎
FanfictionKim Taehyung, criado por sus abuelos paternos en Paris, Francias. Un chico que nunca tuvo buena relacion con sus padres y dedico su vida al trabajo, el cual a pesar de centrarse en la moda, tenia su lado peligroso. Pero un al quedarse solo y entera...