Un completo desastre:

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Comenzó el primero de febrero, habían acordado que sería en el apartamento de Axel ya que era más grande y tenía varios cuartos, sus amigos hubieran preferido que durmieran juntos pero sabían que eso era apretar mucho la suerte

El día para Axel comenzó como cualquier otro, hizo un poco de limpieza fue al trabajo y de ahí fue a recoger, como se había dicho, a su exnovia a su casa, el solo esperaba que estuviera lista porque odiaba la impuntualidad y ella lo sabía

- Hola Axel - Saludó ella desde la puerta de su casa ya cerrada

- Hola Samantha

- Ey ¿Por qué tan serio? Mira yo sé que tú y yo no terminamos de la mejor forma pero, llevemos la fiesta en paz, sabes que odio escucharte que me llames por mi nombre completo

- Sam...

- Mejor - Ella sonríe

Al llegar a su casa, ella comenzó a recordar todo

- Emmm ¿Dónde voy a dormir?

- Pues.... Ven conmigo, preparé el cuarto de arriba para ti

- Gracias

- De nada

- Bajes cuando estés lista ¿Tienes hambre?

- Emm... Si... Gracias

- Si... Prepararé algo de comer para los dos

- Gracias....

- Si... Permiso, te dejo para que te acomodes....

No sé sabía cuál de los dos estaba más incómodo con la situación pero algo era claro, ninguno de los dos estaba feliz

Al bajar a comer ella se sentía rara y un poco fuera de lugar, estar con su ex no era lo mejor para ella y su estabilidad, se suponía que estaba superando esa etapa de su vida pero con todo esto había removido demasiadas cosas

Por otro lado para el tampoco era fácil, ya estaba empezando a ser el de nuevo, pero la verdad era que ella siempre significó algo importante en su vida

Ese día estaba siendo un completo desastre para los dos

Cuando comieron ambos estaban cansados y se fueron a dormir, pero tuvieron sueños con el otro toda la noche

Había una diferencia, el había soñado con todas las cosas lindas que hicieron y ella con las peleas que tuvieron, pero al final de cada sueño había una frase grabada, «A pesar de todo lo amo»

Ella aún lo amaba y el también, ambos eran demasiado orgullosos para darse cuenta de lo que estaba a punto de suceder

Encuentros que cambian todo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora