Te vi y te supe entonces
de alguna otra vida.
Allí estábamos los dos:
tan fuera de lugar,
tan tarde
y, nunca jamás,
tan oportunos.
Escribí luego
escribí como un impulso
escribí como un loco
escribí porque no sé
hacer mejor otra cosa.
Leíste entonces
leíste como un impulso
leíste como una loca
leíste, tal vez,
porque existe poco
a lo que ames más.
Sonreíste y nunca antes
un poeta de huesos tristes
se sintió tan satisfecho.
Sonreíste y nunca antes
una muchacha de ojos muertos
se vio tan bonita
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Erika [TERMINADO]
PoetryNunca he dado a un libro el nombre de alguien real. Todo surgió como un comentario jocoso, pero le di varias vueltas y acabé haciéndolo. Ahora, ante ustedes, un poemario dedicado "a la niña de los ojos muertos", para repetir aquella sonrisa. crédito...