Secreto de amor

capítulo 16

Abrí la puerta y los tres entramos en la primera casa

X: bien, esta casa consiste con dos habitaciones, una sola de las habitaciones tiene baño, tiene otro baño en la planta baja, está la cocina, la sala y el jardín

Nam: es linda, pero si nos expandimos no vamos a tener espacio y será más difícil buscar una más grande cuando seamos tres

Malena: se veía más grande en la foto -miré la casa- si es grande, pero no tiene tantos cuartos -bajamos hasta la planta baja- pero e de admitir que tiene una vista hermosa -sonreí-

Nam: eso sí -la tomé por la cintura- queremos ver la siguiente casa

X: claro que si, señor, vamos al auto -los tres salimos de la casa y subimos a mi auto-
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X: bien, ¿qué les parece? -entramos en la cocina-

Malena: es preciosa -sonreí-

X: me alegra que les guste, esta casa viene con tres habitaciones, dos de ellas tienen baño, un baño aparte en la planta baja, está la terraza, la sala y la cocina y un pequeño cuarto en la planta baja

Nam: es linda -mire toda la casa- ¿te gusta estrellita? -mire a Malena-

Malena: si~ es preciosa realmente -sonreí feliz- me encanta~

Nam: bien, eso es suficiente para mí, queremos esta casa -sonreí y abrace a Malena por la cintura-

X: perfecto -sonreí- vamos a mi oficina para comenzar con todo el papeleo

Los tres salimos de la casa y subimos a mi auto
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Una semana después
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Malena: ah~ es preciosa -me tiré en el sillón- este sillón es muy cómodo -sonreí-

Nam: tan cómodo como para hacer el amor en él -me senté aún lado de ella y empecé a besar su cuello- me gusta mucho el perfume que traes puesto hoy

Malena: deja eso para más tarde -reí- hay que acomodar todas las cosas, aún falta acomodar nuestra habitación y la cocina

Nam: puedo contratar a alguien para que lo haga -empecé a acariciar su muslo sin dejar de besar su cuello-

Malena: no quiero que un desconocido acomode mi casa, quiero hacerlo yo misma, vamos, ayúdame a poner los platos en la alacena -me pare y camine hasta la cocina-

Nam: será un día muy largo -miré al techo-

Malena: Kim! ¡Ven aquí ahora mismo! -grité-

Nam: demasiado largo -me pare del sillón y camine hasta la cocina- espero recibir una buena recompensa por esto -tome algunos platos y los puse en la alacena-

Malena: sabes, algunas personas hacen cosas sin esperar nada a cambio -saque la compra y la metí en el refrigerador-

Nam: pero esas personas no te tienen a ti -me acerque a ella y la abrace por detrás- además~ la recompensa que yo quiero solo tú me la puedes dar

Subí mi mano por todo su muslo y la metí por debajo de su diminuto vestido

Nam: no sabes cuantas ganas tengo de arrancar ese diminuto vestido de tu cuerpo -bajé uno de los tirantes de sus hombros y lo empecé a besar y morder-

Malena: bueno~ no creo que un poco de ejercicio nos haga daño -reí cuando él me voltee y me cargo sentándome en el mesón- creí que estrenaría la cocina cocinando primero