Felix no ha tenido mucha suerte en el amor, aparte de que por ser omega ha sufrido abusos, en su etapa universitaria conoció a un Alfa el cuál llegó a pensar en casarse con él, lo que no sabía Felix es que el destino es una cosa seria y las cosas nu...
Había pasado un mes, Hyunjin seguía compartiendo con nosotros los fines de semana, a veces salíamos los tres o sacaba a Seungmin a comer un helado, o en ocasiones salíamos nosotros dos solos, todo ha ido bien, cada vez estamos más cercanos, y a decir verdad, mi pequeño lo adora demasiado, mi alfita a cada rato anda haciendo planes con Hyunjin para que yo salga con él y eso me hace feliz, porque no lo ve como amenaza, al contrario.
Pero cuando llevas un tiempo de buena racha... ¿Las cosas no pueden ir mal? ¿Cierto?
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Estábamos a mitad de semana, en la oficina esto era un caos total, muchas empresas querían invertir y los dueños no me atendían las llamadas, y de cierto modo tenía miedo de que les haya pasado algo, siempre a inicios de mes teníamos una videoconferencia, y ya han pasado días y aun no se sabía nada de ellos.
Como pude mandé con el abogado a revisar varios contratos para que me diera el visto bueno y ver quienes de los postulados podían invertir, aparte de ese papeleo le tuve que decir a Hyunjin que comprobara la lista de proveedores y de materia prima.
En unos minutos que tomé para despejar un poco la vista del ordenador y la mente de tatas cosas, escuché gritos que al parecer era de la recepcionista y vi como personas entraban a mi oficina.
—Señor no puede entrar si no tiene una cita.
—Me importa poco, entraré igual.
Una vez ambas personas entraron solte un suspiro, lo que faltaba... Changbin.
—Disculpe señor Lee, le dije que no podía entrar sin cita e igual entró, de pasó me trató mal.
Vi de reojo a Changbin. —Descuida Mina, atenderé al señor.
—Con su permiso jefe. -habló para hacer una reverencia y salir de la oficina.
—Toma asiento. -Señalé la silla para que Changbin se sentara.
—Vaya, si que ha cambiado, ahora hasta jefe eres, y yo que creí que ibas a seguir siendo el omega estupido de antes. -rió por lo bajo.
—Bueno sí, ahora soy alguien importante en este medio, pero a todas estas... ¿Qué te da el derecho de entrar así a mi oficina y tratar mal a una de mis empleadas?
—Pues quiero ver a mi hijo.
—¿Por qué? ¿Por qué ahora? Nunca has sido un padre para él, ni cuando nació, preferiste estar fuera de casa revolcándote con tu supuesta pareja destinada en vez de atender la fiebre y los malestares de Seungmin, nunca pasaste una noche en vela cuando enfermó, ni hablar de que ni siquiera llegaste a cambiarle un pañal o bañarlo, entonces no hables de que es tu hijo cuando nunca fuiste un padre para él. -pude ver como la expresión de su cara cambió.
