UN BESO EN MADRID ✶ 𝗲𝘀𝘁𝗲𝗯𝗮𝗻 𝗸𝘂𝗸𝘂𝗿𝗶𝘇𝗰𝗸𝗮.

⠀ 𝐢𝐯. sentimientos encontrados

04 ━━━━ mixed feelings
¡ MADRID 𝟐𝟎𝟐𝟐 !

Las distintas voces festejaban, y aplaudían a lo lejos, en metodo de celebración. El lugar se desbordaba en consecuencia a la cantidad de argentinos encontrados en este, tanto que la multitud fue trasladada a las afueras del lugar debido a que había llegado la hora de cerrar el restaurante.

Aun afuera, las personas irradiaban felicidad, un sentimiento de alivio.

Un grupo peculiar de amigos adolescentes cantaban sin cesar una y otra vez el himno nacional argentino. La pasión y orgullo envolvía a todos los presentes en este exacto momento.

Argentina había salido victorioso del partido, venciendo dos a cero, a Mexico.

Paula había perdido totalmente la noción del tiempo, no sabía que hora era y tampoco le importaba. Ha sido una de las mejores noches de su vida, y eso que ha tenido buenas noches.

Pero ninguna como esa noche, en un pequeño bar de Madrid, orgullosa de su país, bebiendo a lo loco, riendo. Mendes ha estado interactuando con diversas personas a su alrededor, compartiendo la misma pasión.

En especial, con el rubio de ojos marrones.

En ningún momento el susodicho ha abandonado su lado, ni ella el suyo. El se mostraba realmente cómodo con su compañía a la vez que le interesaba saber la vida detrás de esa cara bonita.

Esteban había quedado encantado con la morocha. Su forma de hablar le había fascinado, asimismo las maravillas que decía.
Quedó atónito al notar que compartía varios gustos y cualidades similares con la joven, entre esas, gustos musicales, tipos de películas y preferencias en comidas.

Pero sin duda lo que lo había atrapado eran los infinitos y preciosos ojos de Paula, el joven no podía despegar su mirada de los mismos. Se encontraba perdido en ellos, como si de una isla desierta se tratara. Ellos irradiaban curiosidad, y si se acercaba un poco mas, podía notar el pequeño brillo en estos.

Por otro lado, Paula se encontraba flechada.

Ella creía haber visto hombres mucho mas atractivos, pero no recuerda bien cuando. Esteban era totalmente hermoso, y Paula no lograba dejar de mirarlo. Sus rasgos eran sensacionales, cada detalle en su rostro era precioso.

Estaba hipnotizada por el hombre.

Tan cautivada, que no noto la presencia de un ser humano a su lado izquierdo. La persona interrumpió su conexión de miradas, hablándole al rubio.

─Amigo, ya nos volvemos para el hotel ¿venis?

Se trataba de un joven con pelo ondulado, castaño, el cual llevaba una gorra blanca para atrás en forma de accesorio. El joven le sonríe amablemente a Paula, recibiendo la misma acción por parte de ella. Por inercia, la joven agarra su celular revisando la hora indicada en la pantalla.