Bangzhù wo mama

47 4 0
                                    


Después de unos minutos de llorar y de silencio Adrien y Marinette se sentaron para hablar de la situación.

-Que planeas hacer?

Supongo que lo mejor será tenerlo, no me sentiría bien abortando, aunque aun no tenga una vida. Podría criarlo... o darlo en adopción, depende de ti. 

Adrien tomo las frías manos de Marinette y la miro fijamente a los ojos.

-Me gustaría criarlo- Marinette abrió sus ojos lo mas que pudo- déjame explicarte. La mayoría de los niños que son dados em adopción se quedan en el orfanato hasta los dieciocho, después son echados de allí y se quedan en la calle, no me sentiría bien pensando en eso- la azabache asintió levemente- Además, me gustaría ser el padre bueno y atento que nunca tuve, pero dime tu que opinas.  

-Estoy de acuerdo contigo- dijo Marinette después de analizarlo- tal vez criarlo sea la mejor solución. Pero somos adolescentes, solo tenemos dieciséis años, y la decisión final depende de la reacción que tengan nuestros padres ante esto.

-Tienes mi apoyo al cien por ciento- le dijo Adrien, dándole un dulce beso en la frente.  

Adrien se tuvo que ir rápido por su padre, pero quedo en hablar con Marinette sobre ello mas adelante. Antes de irse, le dio a Marinette un beso rápido en la boca, que dejo a la azabache en el cielo durante toda la noche. 

---En el cajón de Marinette---

-Pollen, Orikko, Daizzi, Ziggy, Roar, se puede saber que están haciendo- dijo kaalki mirando a los kwamis nombrados.

-Shhh, no interrumpas, esto esta mejor que el drama de Juana de Arco- contesto Roar mientras veía a su guardiana dibujar algunos conjuntos para niños pequeños.

 ++++++++++++++++++++++++++

Alya miro de reojo a su amiga, que estaba tarareando una canción mientras dibujaba frenéticamente en su libreta. Cada vez que intentaba ver que estaba dibujando, Marinette cerraba su libreta de golpe y comía un macaron de su bolsa, eso la estaba cansando.

-Oye chica, que me estas ocultando, dímelo ahora mismo o ya no seremos amigas.

-Alya, no puedes amenazarme con eso todos los días solo porque estoy dibujando, podrías ir a otro lado, no es por ofender pero me estas acabando la paciencia.

Alya, sorprendida por ese comportamiento en Marinette, tomo su bolso y se alejo. Pronto, el asiento vacío fue ocupado por Adrien.

-Buenos días Marinette.

-Buenos días Adrien, mira lo que dibuje, se me ocurrió anoche y no pude dejar de pensar en esto todo el día.

Adrien tomo el trozo de papel que Marinette le extendía.

-Wow, es, es hermoso Marinette...

-Gracias... Vamos a otra parte para hablar de ya sabes que...

-Vámonos.

Los dos jóvenes se sentaron detrás de la gradería para hablar mejor sobre... bueno el embarazo.

-Quisiera decirle primero a mis padres- dijo Marinette- tu padre me da mucho miedo y además ellos son quienes me van a ver mas a menudo, y si yo no se los cuento se enteraran por si mismos.  

-Concuerdo contigo, tus padres son comprensivos, mi padre es... un demonio, y se que es mi propio padre, pero es la realidad. Quieres que te acompañe?

-No, mi padre sin duda va a enloquecer y si tu estuvieras allí te partiría en pedacitos. Lo hare yo sola, esta misma noche. Deséame suerte. 

-No soy de desearle nada a nadie- dijo Adrien- pero buena suerte- y después de decir eso, desapareció de la vista de Marinette. 

+++++++++++++++++++++++++++++++

Marinette estaba exhausta, ella no era muy buena prestando atención, pero estos últimos días había llegado a su limite. Sus notas estaban subiendo levemente  y eso puso muy contentos a sus padres.

-Te dije que Marinette era la niña mas inteligente de todo parís.

-No cantes victoria todavía cielo- dijo Sabine- apenas estamos empezando el año. 

Marinette sintió como sus manos temblaban, era ahora o nunca.

-Oh, madre, oh padre- dijo dramáticamente mientras comenzaba a llorar.

-Marinette, que ocurre?

-Bangzhù wo mama (ayúdame mamá )- grito marinette.

-Tranquilízate cariño, aquí estoy- Sabine se levanto de su silla y corrió al lado de su hija para abrazarla. En cuanto se separaron, Marinette se llevo las manos a los bolsillos y extendió algo hacia su madre, quien lo tomo perpleja.

Tom estaba sin voz, y sin saber que hacer, frente a el tenia a dos chicas, una llorando desconsoladamente y la otra estaba pálida. Decidió acercarse a Sabine, y quedo perplejo al encontrarse con una prueba de embarazo, pero la perplejidad paso al enojo cuando vio el resultado.

-Marinette Dupain Cheng, me puedes explicar que es esto?- grito en cuanto recupero la voz.

Marinette cerro la boca intentando contener el llanto para poder hablar, pero las lagrimas no paraban de correr por sus mejillas y el aire le comenzó a faltar.

-Marinette, respóndeme ahora mismo...

-Cariño, no seas tan duro con ella- hablo Sabine, recordando las palabras de su hija, puede que estuviera enojada y sorprendida, pero ella necesitaba su apoyo- tesoro, podrías decirnos como ocurrió esto por favor?

-Fue.. fue, el sábado que, salieron. Yo,.. lo siento... mucho... El, akuma, me, golpeo, yo, no tenia, control...- dijo la azabache de forma entrecortada, recuperando la tranquilidad poco a poco. 

Tom se tomo la frente con las manos - Confié en ti- grito nuevamente- y asi me pagas. 

-Lo lamento, enserio...

La casa quedo en silencio, a excepción de las bocanadas de aire que tomaba Marinette para no ahogarse. Sabine tomo las grandes manos de Tom para tranquilizarlo, ambos llorando por dentro. 

-Quien... quien es el padre?

Marinette lo pensó dos veces antes de responderles.

-El aun no lo sabe- mintió- planeo decírselo mañana. 

-Invítalo a cenar- dijo Tom fríamente.

-Solo si prometes no matarlo.

-No es momento para bromear Marinette- dijo Sabine viendo la expresión amenazante de su marido.

-Esta bien, lo invitare a cenar mañana...

Así se termino la conversación, Marinette subió a su habitacion y se durmió mientras lloraba nuevamente. 

















La curiosidad creo un gato (Adrienette)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora