Te encontrabas sin rumbo alguno, miraste tu alrededor intentando familiarizar el lugar donde estabas, pero no servía de nada.
Tu ropa estaba manchada con sangre habías tenido una linda pelea donde la víctima murió entraste al bosque creyendo que podías ocultarte ahí ignorando el letrero de advertencia el cual llevaba una imagen de casería libre.
Caminabas con la compañía de las hojas rompiéndose por tus pisadas, la noche poco a poco comenzaba a tomar control del azulado cielo junto a la luna la cual saludaba al salir de la cordillera.
El frío comenzó a serse más notorio preocupándote un poco por los peligros que podías obtener de noche por la casería.
— mierda... si tan solo hubiera escapado por la otra calle, no estaría en estos momentos ocultándome en este bosque. Susurraste frotado/a, ante la pésima decisión que habías tomado.
Aunque sabías de supervivencia preferías recargar tu arma por si el momento lo necesitaba matar a cualquiera que diera el ataque hacia tu persona.
Seguiste el sendero el cual te guiaba. Escuchaste un disparo a lo lejos seguido por pasos corriendo pensaste que era una persona, pero no, no era eso sino una cierva.
Por la sorpresa el pobre animal y tú, se quedaron sorprendidos sin poder moverse de la impresión, pero otro disparo resonó rompiendo la sorpresa que contenías tú y el animal.
Quien sin dudarlo escapo colín abajo no tuviste más que esconderte entre los arbustos y hiervas preparado/a para disparar a cualquier persona que tenga las mismas intenciones.
Tu respiración se cortó al escuchar aquellos pasos cerca del lugar preparaste el arma, dispuesto/a, a matar aquel cazador.
Un silbido se escuchó mientras te escabullías por el lugar intentando tener una buena visión ante tu juguetona casería, todo listo.
Levantaste el arma conteniendo la respiración esperando el momento para disparar, aunque tu plan fallo por mucho aquel cazador era un veteado quien ya se había dado cuenta de que estaba siendo cazado, en aquel momento los papeles se invirtieron.
Comenzaste a correr por detrás de los árboles tu único objetivo era esquivar por mucho las balas de aquel cazador.
— carajos... — mencionaste escondiéndote en un árbol todo iba a acabar aquí cierto.
Sin dudar saliste a la vista del cazador corriendo a su dirección todo era parte de un plan ingenioso el cual hacía creer al cazador lo tenía fácil.
Cuando aquel veterano listo para disparar fue interrumpido en el momento en el cual doblaste hacia la izquierda disparándole en la cabeza.
Esta fue la señal la cual advertiría a los demás cazadores del momento.
Te acercaste al cuerpo del cazador sacando un cuchillo que traía consigo.
Levantándote rápidamente para así correr colina abajo sin parar por ningún motivo tu único objetivo era salir del bosque sin toparte con nadie.
En aquel momento la suerte te favorecía, pero claro siempre hay un momento en el cual los papeles se invierten a su gusto.
— cuidado! — gritaste antes de chocar con un chico cayendo con él, colina abajo por unos segundos hasta que dejaron de rodar.
Te quejaste al dolor por el cual fue el causante un árbol quien freno te impulso, recordaste haber chocado con alguien enseguida agarraste tu arma apuntando a la persona quien se había levantado apoyándose en sus brazos.
Escaneaste su apariencia, era moreno de ojos cafés al igual que su cabello aparentaba unos 20 o eso creías, decidiste levantarte con tus pocas fuerzas sin despegar el arma de aquel joven que solo te miraba con una leve sonrisa en cierto momento pensaste en que era un loco o tenía problemas mentales.
desviaste tu mirada hacia arriba notando y escuchando pasos acercándose lo único que mencionaste fue un. — esto no puede ser peor. antes de que volvieras a correr intentando escapar esta ves sabias de que no podías simplemente irte por los caminos debías escapar por alguna otra parte sin saber a dónde ir alguien te agarra del brazo era el mismo chico el cual te ayudo a escapar escondiéndose en una cabaña parecía que era de él o algo así.
Desviaste la mirada sorprendida/o, aquel chico cubrió tu boca con su mano habías bajado demasiado la guardia intentaste agarrar tu pistola siendo imposible por aquel agarre persistente de aquel.
— quédate en silencio. Menciono con un tono de voz un poco diferente a lo que te acostumbrabas escuchar.
Le hiciste caso en estos momentos lo mínimo era comenzar una pelea con la persona que te ayuda a escapar, suspiraste de manera baja el espacio entre tú y él era disminuido lo cual era incómodo para los dos, pero no tenían otra opción si querían vivir, aquellos otros cazadores como aquel chico nos estaban buscando en aquella cabaña en el bosque se escuchaba como tiraban y quebraban todo a su paso, no nos pudieron encontrar saliendo de la cabaña, pero seguían buscándolos.
— creo que se fueron. Susurro el chico abriendo un poco la puerta del estante donde estaban notando de que no había nadie en el lugar y sin más salieron del escondite.
— ¿y cómo te llamas? Al menos dame tu nombre por si necesitamos escapar en último momento. Hablo aquel chico alto.
— mi nombre es (s/n)... — respondiste con desconfianza, aunque creías que no lo notaría aquel chico.
— oh, es un gusto mi nombre es alastor, pero bueno necesitamos salir de aquí si quieres vivir. Menciono acompañado con unas carcajadas.
Ambos salieron de la cabaña caminando por los senderos notabas o bueno ya avías analizado de que él estaba familiarizado con este lugar.
No hablaron nada, ya que no había ni un grano de confianza, siempre mantuviste una distancia con alastor en todo el trayecto del sendero.
Escucharon unos pasos por entre los arbustos alarmándolos un poco, caminando más rápido, aunque no te gustaría darle el favor de que sentías miedo en aquel momento acercándote un poco más a alastor, pero manteniendo la distancia.
— debemos correr, nos están siguiendo. Susurro alastor agarrando su rifle para comenzar a correr.
Por un falso paso caíste hasta un acantilado agarrándote del borde, alastor agarro tu mano ayudándote a levantarte para seguir corriendo le agradeciste.
Pasaron 2 años cuando moriste por un disparo en el corazón y pues claro al haber matado gente en vida tu alma fue sentenciada al infierno, un día como cualquier otro te topaste con alastor quedando sorprendidos los dos.
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sobrevive a alastor (no es mío)
RandomTe encontrabas sin rumbo alguno, miraste tu alrededor intentando familiarizar el lugar donde estabas, pero no servía de nada. Tu ropa estaba manchada con sangre habías tenido una linda pelea donde la víctima murió entraste al bosque creyendo que pod...