My torture of love

la diferencia

Narrador

La pelinegra  se había dado por vencida desde de pasar horas tocando la puerta y gritar pero no obtuvo respuesta.

No comió nada de lo que unos hombres le habían llevado, ni siquiera vio la ropa que estoy le dejaron encima de la cama.

Solo quería volver a casa.

Se hizo en un rincón del oscuro cuarto, no quería nada, lloraba sin consolación.

El de trenzas volvió de su reunión con Wilson, hablaba con el pelirubio y con Erick de sus próximos movimientos.

Quería llevar a drogas a Estados Unidos, sería un gran negocio de parte de que dejaría mucho dinero, subiría su estatus como Narcotraficante.

Ambos hombres que escucharon a su jefe con atención estuvieron de acuerdo

Sabían de los peligrosas de esto, realmente no les importo, eran cosas muy básicas para el nivel de tom, llevado años en esto y sabía como solucionarlo.

---"Vayan a descansar imbéciles, se ven muy cansados, mañana hablamos, quiero ver ala mocosa."--Dijo Tom intentando sonar un poco amable, fracasando completamente en esto.

Ambos hombres se miraron y luego a Tom y en coro contestaron.

---"No te queda kaulitz, con la cara de culo que tienes, no te sirve ser amable."--

---"Con la cara de culo y levantó más putas que ustedes dos unidos y largos de antes de que cabreen."--dijo tom.

Adram y Erick soltaron una carcajada y se fueron a sus habitaciones perdiéndose de la vista del pelinegro.

Como el de trenzas no vio más a sus compañeros, miró la puerta en la que se encontraba Valeria.

Tom se dirigió a la puerta y preguntó a uno de los hombres.

---"¿Qué ha pasado con la chica que estaba aquí?."--dijo tom alzando una ceja preguntando.

---"Ella hace horas dejo de insistir, no se ha escuchado ni un sonido de ahí, además la señora que le trajo el almuerzo se molesto por que la señorita ni probó su plato, Señor Kaulitz."--dijo uno de los hombres con su mirada al frente como una maldita estatua.

El pelinegro  utilizó una linterna para poder ver, alumbró la cama y no vio a la chica ahí.

Busco por la habitación hasta encontrarla en un rincón acostada durmiendo, tenía los ojos hinchados de tanto llorar.

El de trenzas se dio cuenta que la mujer no se había cambiado la ropa y de que no había comido nada en todo el día.

Realmente él de trenzas se estaba conteniendo para no levantar la de un solo golpe y obligarla a que comiera y se cambiará.

La vio por unos minutos, su jodido rostro angelical lo ayudo a calmarse, ella le transmitía paz.

Tomo a la pelinegra en brazos y la acostó sobre la cama con toda la delicadeza que pudo, nunca se había esforzado tanto por algo y menos por unas de sus mascotas como lo era la mujer que dormía frente a él.

Tom la miró con seriedad al ver lo que había ocasionado en él.

Salió de la habitación ordenando a los hombres que colocaran una mesa junto a la cama con pastillas para el dolor de cabeza con una botella de agua, también ordenó que levantarán la comida que estaba en el plato y que temprano le llevarán el desayuno a la mocosa.

Tan pronto tom hablo los hombres trabajaron tan rápido como sus pies se los permitió en sumo silencio.

Pov's Valeria