𝐍𝐨𝐰 𝐲𝐨𝐮 𝐜𝐚𝐧 𝐫𝐞𝐚𝐬𝐭 𝐢𝐧 𝐩𝐞𝐚𝐜𝐞.

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𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫 𝐏𝐎𝐕.

Después de la sesión de Woods y Cerrato, este se retiro del lugar no sin antes dejarle algo a la de lentes, era la sudadera de keysi la cual siempre llevaba con ella aunque hicieran 40 grados, al tenerla en manos comenzó a llorar, ahogando sus lágrimas en este mismo, los recuerdos del día del incidente volvían a su cabeza, la culpa no la dejaba por nada en el mundo, no pudo hacer nada, ellos ya no estaban, no tenía nada, camino hacía el baño con intenciones de limpiarse la cara, abrió la llave, acumuló un poco de agua en sus manos y se la hecho en la cara, levanto la vista y se vio al espejo, detrás de ella habian 4 figuras de color negro con los ojos rojos, las cuales tenian sus manos en su cuello, solto un pequeño grito para no alarmar a los de seguridad y cayo al suelo, el sonido de las gotas de agua cayendo en al lavabo y su respiración entrecortada estaban coordinadas, gateo rápidamente hasta la mesita que estaba al lado de la cama en la cual no hacía más que acostarse y ver al suelo y saco un bote de pastillas de un cajón, tomo un puñado y las trago cómo pudo, una vez se calmo se sento en la cama y se tapo el rostro, una sirena sono, era hora de desayunar, así que fue a la cafetería aún con la sudadera de keysi amarrada a la cintura, tener la sudadera era cómo tenerla a ella, cómo siempre, los demás pacientes socializaban entre ellos, a excepción de ella, se fue a una esquina alejada de todos y se sentó, nisiquiera se molesto el probar un solo bocado de su comida, sentía que alguien se acercaba a ella así que de reojo vio a la persona, un chico de cabello algo largo, cara de orto, ojos verdes y con vendas en el cuello y brazos.

- Oye tu! Dame tu comida! -dijo entre gritos.

A pesar de que no queria comer, no se la daría a un tipo que nisiquiera topaba.

- No. -Dijo firmemente sin siquiera ver al otro a los ojos.

El tipo empezó a hacer berrinche el cual Jennifer ignoraba, su cabeza comenzaba a doler así que trato de irse de ahí, cosa que el antes mencionado le impidió ya que jalo de la sudadera que llevaba en la cintura, cosa que hizo que se volteara rápidamente.

- Uuh! Que bonita! Te importa si me la quedo?

- No, damela.

- Mmh, No! Ahora es mía!

Esto hizo que La de lentes tratara de arrebatarsela aunque no servia de mucho ya que su contrario era más rápido.

- Damela, no me hagas pedirtelo por las malas! -Dijo Jennifer quitandosela con brusquedad.

Esto le enojo al de ojos verdes haciendo que jalara nuevamente la sudadera, haciendo que se rasgara de una de las mangas.

- Ow..se hecho a perder, pero bueno! -dijo entre risas.

Por otro lado, Jennifer lo veía con odio, enojo, y todas sus variantes, tomo un tenedor que estaba en la charola de comida y se abalanzó contra el chico de ojos verdes, después de eso todo fue borroso para ella, pasaron los minutos y estaba en su habitación de nuevo, frente al espejo del baño viéndose fijamente, tenía sangre en la ropa y en parte de su rostro.

("Mira lo que haz hecho...")

Decía una voz en su cabeza, la frase se repetía constantemente, una, otra y otr vez, se agarro la cabeza con ambas manos y comenzó a gritar, sus piernas temblaban por montones y no pudo mantenerse de pie, aun en el suelo seguía gritando dándole patadas al aire, esto obviamente alarmaria a los doctores y a los de seguridad, entraron rápidamente y le pusieron un sedante haciendo que quedara inconciente.

Al despertarse, parecía estar en un extraño vacío, todo era negro, no había nisiquiera un poco de luz, solo estaba ella, segundos después apareció algo brillante detrás de ella, se volteó y vio a Nada más y nada menos que a su mejor amigo, Christopher.

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⏰ Última actualización: Jul 29 ⏰

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