Amor Lombardo
Me desperté a la mañana siguiente con los gritos de Alessio y Emilio estaban peleando por una camisa que parece se había mezclado entre sus cosas, quería seguir durmiendo pero conocía lo suficiente a mis hermanos como para saber que está pelea duraría rato largo.
Tome mi toalla con las cosas que utilizaría para darme una ducha, el baño estaba afuera por lo que tenía que competir con mis hermanos para poder bañarme.
Mi papá tenía su propio baño en su habitación por ser la principal y había otro baño de visitas abajo, ese no tenía ducha.
Me di una ducha de veinte minutos, salí del baño y en ese momento Donato venía subiendo las escaleras, tenía un short deportivo color negro y una camisa manga larga del mismo color, tenía una manzana en la mano y su teléfono en el otro.
— Buenos días, fea. — Se acercó para dejar un beso en mi frente.
— Hola chico fitness...
Entre a mi habitación para despojarme de mi toalla, me eche crema en todo mi cuerpo y me puse la ropa interior, escogí un pantalón ancho, un top color blanco y unos zapatos del mismo color, deje mi cabello suelto, me eche un poco de rubor, máscara de pestañas y un poco de brillo en los labios, perfume y baje.
— Bendición. — Saludé a mi papá que estaba en la cocina revisando su teléfono.
Su sonrisa se agrando al verme.
— Aún no puedo creer que voy a tenerte todos los días dándome los buenos días. — Rodeo la barra para abrazarme.
— Que exagerado eres. — Me reí. — Yo también te quiero.
— Iremos al súper mercado a buscarle a tu abuela unos ingredientes que les hace falta para la comelona que está haciendo. — Se rió. — ¿Tus hermanos?
— Donato acaba de subir, Adrianno probablemente está aún durmiendo, Alessio y Emilio se están peleando en la habitación de Emilio por una camisa. — Expliqué. — Bienvenido a la responsabilidad paterna una vez más.
— Él suspiro. — Extrañe todo eso.
— Solo tú.
Él subió las escaleras y yo tome mi teléfono para enviarle un mensaje a mi mamá, le envié una foto mía mandándole un beso y me puse a ver tiktos mientras mi papá organizaba a mis hermanos.
Pase a Instagram dónde me conseguí con una foto de Lorenzo Zurzolo en el aeropuerto de Roma, al parecer había llegado de su viaje a Miami, mi corazón se aceleró un poco con la idea de que capaz podría conseguirmelo en cualquier momento.
Desde que ví Baby e investigue un poquito de sus actores, cada vez que pisaba Roma veía a los lados más de dos veces para asegurarme no perderme nunca el momento si llegase a pasar alguno, sobretodo Lorenzo, mi amor.
Mi ilusión era la siguiente; paseando como un día cualquier, el sol en su máximo esplendor para que podemos ver bien el momento, nos chocamos en la calle, nos miramos a los ojos y allí, en ese justo momento nos damos cuenta que estamos enamorados, nos casamos, tenemos dos hijos y un perro.
¿Bonito, cierto?
Pero es una ilusión, por lo que apague mi teléfono y me levanté de la barra para ir a mi cuarto a buscar mi cargador e irnos, mi papá había logrado que mis hermanos se despertarán, dejarán de pelear y se arreglaran.
Aún tiene el toque de papá latino.
Nos subimos al auto y como dijo papá pasamos primero por el súper mercado, Emilio tomo un carrito y empezó a seguir a mi papá por todos lados mientras él veía en su teléfono lo que mi abuela le había pedido.