Tus Hijos Me Aman

Sorpresas - cap 2

La luz le daba en la cara y era muy molesto, se removió de su sitio hasta que sintió como alguien lo agarraba del brazo y lo pegaba a su pecho

—¿Puedes dejar de moverte? —hablo Sergio con voz ronca

Max abrió los ojos inmediatamente con el vago intento de levantarse, pero el agarre del mayor era mucho más fuerte, siguió intentado pero no obtuvo ningún resultado, lo que más le frustraba era que no podía ver su cara.

Verstappen se inmovilizó al sentir la respiración de Pérez en su cuello y leves besos en este. Max se sintió mal, al parecer el mayor pensaba que él era Carola.

Con la voluntad que le quedaba trato de mirar a sus lados en busca de uno de los chicos, pero de ellos no había rastro. Ahora si maldecía haber aceptado a quedarse a ver la película.

—No sabes lo mucho que me gusta tu perfume Max

Max se puso rojo al instante, ¿Entonces Sergio si sabía que era él? ¿No estaba soñando verdad?

—¿S-sergio? Tienes que despertar, tus hijos pueden llegar en cualquier comento

—Que importa, solo quiero estar contigo —y lo abrazo mucho más siguiendo con su dosis de pequeños besos

Max ya no sabia que hacer, quería que alguien lo salvara de esa situación, aunque le gustara mucho estar junto a Sergio, no se aprovecharia de el.

Mick iba muy contento a la habitación de su padre ese día pasarían el día juntos como Sergio lo había prometido, ya tenía la lista de adonde irían y a que hora seria todo. Solo tenía que levantar a su padre e esperar a que se alistara

Yuki, iba saliendo de su habitación cuando vio a Mick pasando frente de él. Lo primero que hizo fue acordarse que su padre seguía ahí con Max y al parecer se le había olvidado ayudarlo a salir en la madrugada. Pero la foto que tenía de ambos era mucho mejor

Agarró a Mick del brazo y lo metió a su habitación cerrando con llave. El rubio se sintió más que confundido ¿Había hecho algo malo?, en cambio su hermano fue corriendo a la habitación de su padre para ayudar a salir a Max antes que su padre se diera cuenta

Abrió la puerta con todas sus fuerzas asustando a ambos chicos que se encontraban en la cama. Sergio por instinto empujó a su acompañante al suelo y agarró su pistola apuntando a su hijo. Quien solo levantó las manos.

Por otro lado Max se había logrado levantar del suelo, pero aún le dolían las costillas por la patada que le habían dado y la rodada que dio hasta chocar con el marco de la puerta del baño

—¡Papá, baja el arma! —grito el menor queriendo correr para ayudar a Max

—¡Yuki me asustaste! —Sergio se había relajado un poco y guardó su pistola— ¿Estás bien Max?

Sergio y Yuki fueron en dirección a Max que se agarraba la zona afectada. Se había agarrado del marco para no volver a caer, pero el dolor cada vez era más fuerte

—M-me duele mucho —el rubio no pudo más con el dolor cayendo al suelo, por suerte Sergio ya estaba cerca para sostenerlo y llevarlo a su cama

—Hey tranquilo, te voy a ayudar —Yuki estaba atento con todas las interacciones que tenían ambos, pero claro que Sergio se dio cuenta— Deja de mirar y anda con tus hermanos, diganle a Carina que les prepare el desayuno y una sopa para Max. Yo lo ayudaré.

Yuki solo asintió y se retiró del lugar, no sin antes tomarles una foto sin que se dieran cuenta. Mientras iba caminando se encontró con George quien se dirigía a las escaleras

—¡Hey George! —el mayor volteo— Dile a Carina que vaya preparando el desayuno, papá va a demorar. Yo voy por Oscar

—¡Bueno! —grito siguiendo bajando las escaleras