Un nuevo Arconte (Traducción)

Capítulo 10: Pague sus cuotas

Buenas días banda.[Estás historia es solo para entretener]~Derechos de autor, está teoría/fanfic no me pertenece. El animé junto a la historia original del anime No me pertenece sus créditos a sus respectivos creadores.Yo solo lo traduzcoCreador de la teoría/fanfic: NeonZangetsu

Pague sus cuotas

Los escuchó en sus sueños.

Un choque desgarrador. Elementos en conflicto.

Los gritos de pánico de la gente clamando a su Gnosis, a él.

Y allí, de pie sobre el caos... estaban de pie. Cinco figuras, envueltas en sombras, pero bañadas en luz. Era un contraste extraño, le tomó un momento darse cuenta de qué (¡quiénes!) eran. Qué eran. Una estaba alta y orgullosa, envuelta por un relámpago, sus ojos de un violeta intenso. El segundo era pequeño, tan diminuto que parecía un niño. Ella lo miró con abierta curiosidad. Al tercero apenas podía verlo. El cuarto le dio la espalda por completo, ignorándolo. Los conocía a todos, a pesar de no haberlos conocido nunca.

Arcontes.

Uno por uno, los vio morir.

Pryo cantó una canción de locura devoradora y cayó en sus propias llamas. Hydro se ahogó en las profundidades. Electro se lamentó y se desplomó en el dolor. Dendro se marchitó de soledad.

Desaparecieron incluso cuando él los alcanzó, hasta que finalmente, la escena cambió.

"¿Kurama? ¡Oye!" Su voz resonó en el vacío. "¡¿Kurama?! ¡¿Estás ahí?! ¡Contéstame!"

A su alrededor la oscuridad se disolvió; en su lugar nació un palacio de frío hielo y piedra.

Se giró y encontró a una mujer joven desplomada en un trono helado. Su rostro estaba envuelto en sombras, sus ojos como hielo. Ella buscó. Las sombras desaparecieron, revelando una belleza eterna que no tenía esperanzas de describir, así que ni siquiera lo intentó. Ella lo vio. El la vio a ella. A través del sueño -¿o fue una visión?- ella extendió una mano. Sus piernas lo traicionaron y se encontró dando un paso adelante. Ella no lo denunció. No le pedí que se arrodillara. Ella sólo... se quedó mirando...

.

..

...y luego ella lo sorprendió.

"Te veo, sangre nueva."

Se quedó helado.

"Por fin ha llegado nuestra reunión tan esperada". su voz podía provocar una tormenta de nieve, aunque su sonrisa la deshielo. "Aun así, pensar que te entrometerías en mis sueños. ¡Qué atrevido de tu parte!" Dedos pálidos tamborilearon contra su trono. " Tan nuevo en el poder, sólo unos días con tu Gnosis, y ya caminando en sueños." ella se llevó una mano a la barbilla, tarareó e inclinó la cabeza para mirarlo más a fondo. "Curioso. ¿Es por eso que el viejo Morax se interesó en ti? No importa. Así como tú ves mis sueños, yo veo los tuyos. El camino va en ambos sentidos. ¿Quieres despertar?"

Logró asentir exasperado. "Yo... creo que eso sería mejor. No pertenezco aquí." Echó un vistazo a los soldados silenciosos. "Dondequiera que esté aquí".

"¿Aquí?" Los labios carnosos se curvaron en una sonrisa. "Estás en Snezhnaya, forastero. Bienvenido al palacio de la zarina". ella levantó una mano y su entorno se aclaró por completo. "A MI dominio."

Un ceño frunció su rostro. "Estás actuando como si yo debería conocerte."

"Lo harás, a su debido tiempo." Con un único y fluido movimiento, se puso de pie y le puso una mano pálida en la cara. "Como ambos despreciamos a ese maldito bastardo de Barbatos, te dejaré ir con una advertencia. No habrá una segunda vez. No vuelvas a tocar mis sueños sin permiso. Los Arcontes pueden tener la habilidad, pero eso no nos otorga el derecho. ".