CAP 36

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"¡Eh! ¡Qué estás haciendo......!"

Como si estuviera enojado, el joven señor golpeó la mesa y se levantó de su asiento.

Fruncí el ceño cuando levantó la mano para agarrar a Leon por el cuello.

"Detente, si tocas a mi sirviente, yo tampoco me quedaré quieto".

Apagué el ventilador y le advertí que bajaba.

– Oh, ni siquiera le pregunté su nombre. Ni siquiera tenía curiosidad".

Edgar debería haberme dado alguna información básica.

Ahora ni siquiera puedo preguntar su nombre.......

pero necesito volver a comprobarlo.

"Señorita, ahora debo escuchar la explicación de por qué este sirviente ha hecho este insulto".

—me dijo, mordiéndose los dientes con fuerza—.

Eso es lo que quiero preguntarle a León.

Me palpitaba la cabeza. ¿Qué demonios estás pensando.......

"En ningún otro lugar el sirviente limpia el té con la lengua".

Claro. ¿Dónde vas a hacer esto?

Rápidamente sacudí la cabeza ante las palabras del joven señor. Parece que esta es probablemente la única manera.

"Bueno, es verdad. En un lugar normal".

"¿Normal? ¿Eso significa que la familia Velois no es una familia normal?"

Obviamente era un tono sarcástico.

Golpeé el pañuelo del carrito sobre la mesa.

– Suspiro, Edgar volverá a enloquecer si se entera.

No hubo respuesta. ¿Qué puedo hacer ahora?

"La piel humana es suave. Lo sería aún más si fuera una lengua".

"¿Qué estás tratando de decir ahora?"

"Me da urticaria cuando uso estos pañuelos baratos de forma incorrecta".

El joven duque, de quien ni siquiera sabía su nombre, se rió a carcajadas de mis palabras.

"A menudo uso la lengua del sirviente en lugar de un pañuelo. Es bastante cálido y suave".

"¡Eh! ¡Eso es lo que estás diciendo!"

No pudo contener su ira nuevamente y derribó la mesa.

Se barrió el pelo como si estuviera ansioso y recobró el aliento.

Abrí los ojos de par en par y fijé los ojos en la muñeca del joven duque.

"Si los dos estamos progresando bien, la saliva no debería ser tan mala".

De todos modos, ni siquiera tenía la intención de casarme con él, así que ¿por qué no haces un escándalo por esto?

Además, creo que está claro.

Crucé los brazos y levanté ligeramente la punta de la barbilla.

"Escuché que te estás divirtiendo estos días"

"¿Eh? ¡Sé preciso quién!"

"Oh, es muy diferente de lo que he escuchado".

En realidad, no escuché nada. Sin embargo, ha habido una tendencia entre los nobles desde hace mucho tiempo.

Hacer un amante prematrimonial. Relación secreta y bastante emocionante.

"Si no te importa, ¿tal vez un segundo?"

"¡Ja! Qué grosería".

—Tú también fuiste grosero conmigo, ¿verdad?

Le abanicé la camisa.

Luego, el patrón fue revelado en la muñeca oculta.

'Tú, pequeñita punk'.

Es cierto. No me lo perdí antes.

"¡Esto es...!"

El joven duque avergonzado se apresuró a esconder el patrón.

"Supongo que querías el poder de mi padre, ¿qué debo hacer? No soy tan amable".

En realidad, no lo habría visto si no estuviera enojado antes.

"Me pregunto cómo sería si mi padre se enterara de esto".

Doblé el abanico con una sonrisa y lo apoyé en mi barbilla.

"¿Qué quieres hacer?"

Se estremeció ante mis palabras.

"Ahora que lo pienso, ¿cómo te llamas?"

...... Cedric, Cedric Amelan".

Cedric tembló con una cara despectiva.

Dijo que el patrón aún no había aparecido, y eso era mentira.

Así que mentiste sobre tu edad.

Lo miré con ojos fríos.

"Joven Lord Cedric Amelan. Lo siento por tu compañero.

Era sincero. Al enamorarme de ese tipo, fue triste

que no quisiera perder más el tiempo.

"Está bien, entonces, hablemos bien el uno del otro por hoy"

Me levanté de mi asiento, lo miré y le guiñé un ojo a Leon.

"No es bueno hacerlo obvio frente a los demás de esta manera. Ven aquí".

Me acerqué a León, que estaba parado. Los ojos de Leon parpadearon lentamente.

Resoplé y arrastré la mano de León.

Dios mío.

"... ¿Elle?

¿A dónde va el espíritu de antes y vuelves a hacer esta expresión?

"Uh, shh. Shh. Leon, dejemos el salón así".

Miró a Cedric, que todavía no tenía señales de levantarse de su asiento, y salió.

* * *

"Por cierto, ¿qué te pasa?"

Solo quería escuchar una explicación de por qué hiciste eso.

Sin embargo, León no abrió la boca ni puso excusas.

"¿Eh? Leon. Dime. ¿En qué estabas pensando en hacerte pasar por asistente?

Me puse la mano en la cintura y acerqué la cara a León.

Leon limpió mi ropa desordenada y pronto sonrió ampliamente.

"Simplemente, me pregunto si puedo verte".

Quiero decir, estoy preguntando si fue cuando conocí al hijo del duque.

"... Tengo curiosidad porque escuché que vino a ti".

Ah.

Te ves así otra vez.

Después de todo, no podía discutir más. Bueno, ya que el trabajo terminó bien (?).

—¿Sabías que vino aquí?

"...... Lo vi por casualidad".

"Entonces te avisaré. No hagas eso de ahora en adelante".

No es bueno para ti ni para mí.

"...... Elle, me alegro de que el patrón no haya aparecido en ti.

León no respondió a mis palabras e inmediatamente habló sobre el patrón.

Es cierto. Era libre. Tan pronto como aparece el patrón, se decide un compañero.

Si apareciera un patrón, quién sabe si sería un compañero tan extraño.

El solo hecho de pensarlo me puso la piel de gallina.

"Bueno, esta vez no. Pero, ¿por qué el patrón de repente?

"Sólo. Eso espero...... No quiero verte sonriendo al lado de otro tipo".

Todavía me río mucho.

A menudo me reía delante de los demás, así como de León.

—¿Y bien, León? Sonrío mucho......."

Otra vez, otra vez.

Un ambiente diferente. Y la forma en que León me miraba había cambiado.

Cerré la boca con fuerza en línea recta y miré a León.

¿En qué demonios estás pensando ahora mismo?

León miró la mano que yo sostenía.

"Así, siempre me tomas de la mano primero".

"Esto... No pude evitarlo. No puedes quedarte ahí".

Inventé una excusa apresurada, pero no esperaba tomarle la mano hasta ahora.

Solté la mano de León, que había sostenido con fuerza.

León me miró con una expresión de arrepentimiento en su rostro.

"Leon, ¿y si te preparas?"

"...... Sí".

Él asintió de mala gana.

"Oh, debería irme. Creo que mi padre me encontrará".

Es una excusa, pero es peligroso ser así.

Y realmente Edgar podría encontrarme. Si le contara al duque todo lo que he hecho antes.

—dijo Leon en voz baja, agarrándome la punta de la manga mientras me alejaba—.

"Elle, eres mi única amiga y familia. Mi única familia. Y mi pequeño mundo".

"...... ¿Qué?"

"Así que solo quiero mi cinta en tu muñeca".

Leon me acarició suavemente la muñeca.

De nuevo, la amargura brilló en sus ojos.

* * *

Cuando entré en la habitación, mi corazón latía como loco.

Parecía una persona que huía como si alguien me persiguiera.

"¡Diria! ¡Dame un poco de agua fría con cubitos de hielo!"

En mis palabras, Diria trajo agua helada sin saber por qué.

Todavía parecía desconcertada.

"¿Señorita? Se supone que deberías estar viendo al joven lord Cedric ahora mismo.......—

Extendí la mano y dejé de hablar.

"Diria. No hables de él. Porque te volverás loco si escuchas la historia".

Ni siquiera puedo decir que tenga un patrón en la muñeca, ¿cómo se hace esto?

Estoy pensando en usar esto como una debilidad por ahora.

"Es difícil reventar esto ahora".

Tuve que esperar un poco más. Porque León está involucrado.

Tragué agua fría de inmediato.

Ese no es el punto ahora. El comportamiento de León fue como.......

Oh! ¡No, eso no puede ser cierto!

Negué con la cabeza violentamente. Aun así, mi corazón no se ha calmado.

"¡Diria, un trago más!"

—¿Está bien, señorita?

—me preguntó con cara de preocupación.

Suspiré y negué con la cabeza.

"No preguntes. Me temo que volveré a enloquecer si lo escupo".

Diria no preguntó más. Ella solo compró un vaso de agua fría que yo quería y se lo entregó.

Cuando volví a tragar, el frío se extendió por mi garganta y por mi pecho.

No es suficiente. Esto no me calmará.

—Beba despacio, señora. Si bebes agua fría tan rápido, tu corazón podría detenerse".

"Ojalá se detuviera".

"¡De qué tipo de historia aterradora estás hablando! Te meterás en problemas".

Diria se tapó la boca con las manos y abrió mucho los ojos.

—De verdad.

Lo decía en serio.

Mi corazón estaba a punto de estallar con un salto tan loco.

Cálmate, corazón loco.

Me golpeé la cabeza contra la mesa y cerré los ojos.

"...... ¿Qué vas a hacer realmente?"

No soy tu compañeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora