Honor.

5

--Tazuna san, es bueno conocerte por fin. El emperador me habló maravillas de ti.-- Naruto hablo con genuina alegría cuando vio entrará a Tazuna, acompañado de Kakashi.

Habia tardado dos días en venir, excusandose en su tabajo en el puente, pero eso no molesto a Naruto qué estaba alegre de dejar atrás el papeleo de lidiar con una remodelacion entera de un país, y la administración de su nueva fortuna.

A pesar de las quejas de algunos por que Nami no kuni se quedo con toda la fortuna de Gatõ, ninguno se atrevió a objetar, la noticia de que el nieto de Uchiha Madara había tomado el control de del País y las empresas Gatõ fue suficiente para calmar cualquier discusión.

Naruto se levanto de su escrito y con una ligera sonrisa se acerco al viejo constructor que entro a paso temeroso entró a la oficina viendo la falta de una de las paredes.
Con algo de miedo solo volteo a ver a su nuevo líder el cual seguía sonriéndole amablemente, algo que lo aterro más.

--No te dejes guiar por nuestro primer encuentro.-- Naruto dijo en un tono tranquilo. --Realmente no quiero hacerte nada, solo te e llamado para hacerte una oferta de trabajo.--

--¿Una oferta de trabajo?-- preguntó Tazuna, con sorpresa. --¿Qué clase de trabajo?--

--Reconstruir este país.-- dijo Naruto sin titubeo y yendo directo al punto. --Verás, los matones de Gatõ, y la propia negligencia de los propios habitantes del país a deteriorado las edificaciones, toma este faro como ejemplo.-- Naruto solo señaló su alrededor para enfatizar su punto.

--Según el emperador, eres el mejor constructor de este país.-- Naruto hablo en un tono más profecional calmando las inquietudes del constructor. --Y por el dinero no te preocupes, la fortuna de Gatõ es tan basta que podemos permitirnos ocupar materiales de la más alta calidad.-- Naruto endulzo más la propuesta y sonrió ligeramente al ver la mirada de ambición que tenía el hombre.

--¡Ho! Uchiha San. Sabía que podia encontrarlo aquí.-- La nueva voz que interrumpió los pensamientos de Tazuna provino de él emperador, el cual entro a la "oficina" acompañado de una joven mujer, de cabellera rubia, y que parecía estar molesta por estar presente en el lugar.

--Veo que estas ocupado. No te quitaré más tiempo.-- El hombre dijo después de darse cuenta de la presencia de Tazuna y el Konohanin, aunque no pareció avergonzado por su interrupción.

--Ella es Lazuli. Es mi hija, de mi primer matrimonio, ella y sus hermanos están ansiosos de unirse a las fuerzas shinobi.-- presentó con alegría el emperador, señalando a la joven mujer.

Naruto solo vio a la rubia que parecía más molesta, aunque no podía desir si fue por lo que dijo el hombre, o por simplemente estar ahí presente.

--Bueno, sus hermanos están ansiosos, ella realmente no se unirá a las fuerzas shinobi, será tu secretaria.-- Dijo el emperador con más alegría.

--¿Mi secretaria?-- preguntó Naruto, con sorpresa.

--Aún no confío del todo, en usted. A demás de que ella me avizara de todas tus decisiones, ella le ayudará a manejar cualquier asunto.--

A Tazuna y Kakashi le sorprendió la sinceridad del emperador y solo siguieron observando la interacción de los dos líderes de Nami no kuni.

--Mi hija me ayudaba en la administración de los recursos, y cosas por el estilo, y ahora que yo solo me enfócare en lo religioso creo que su talento será más de utilidad para usted.-- Dijo el emperador en un tono tranquilo.

Naruto volvió a observar a la chica, no mayor a los 18 años, que parecía que atacaria a su padre en cualquier momento, aunque de nuevo no sabía si era por la vergüenza de que su padre parecía tan orgullosa de su talento, o por un genuino odio al emperador.