Like Animals [Shimkongz]

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♪Ur not my bf♪

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Pasaban de las 9 de la mañana cuando el menor despertó aprisionado por los firmes brazos de Gyu. La respiración del chico le rozaba el cuello y cuando intento girarse para verlo, el mayor despertó dando una profunda respiración.

— Gyu tengo que irme — susurro Ricky.

— ¿No podemos quedarnos aquí unos cinco minutos más? — pregunto con voz rasposa.

— Tengo clases en unas horas Kim — menciono el rubio.

El mayor apretó el cuerpo de su acompañante una vez más y lo dejo ir. Ricky se levantó completamente desnudo y comenzó a buscar su ropa en diferentes partes de la habitación.

Kim destapó su propio cuerpo con intenciones de levantarse, sin embargo la vista que le brindaba Shen lo hizo quedarse recostado por más tiempo.

— Después de lo de la última vez pensé que tendría que rogar más para que vinieras — dijo el mayor mirando como Ricky se vestía.

— ¿Cinco días completos rogando es poco para ti? — dijo con burla el menor, mientras miraba el desnudo cuerpo de su acompañante.

Kim rio con sarcasmo y Shen siguió mirando atentamente al mayor pensando profundamente.

— ¿Qué pasa? ¿Quieres una ronda mañanera? — pregunto curioso Kim.

— No estúpido — dijo el menor y suspiro — recordé que no podremos vernos tan seguido en estás semanas.

— ¿Qué? ¿Por qué? — el mayor se vio tan desconcertado que se sentó en la cama.

— Gyuvin — dijo Ricky lento, como si le hablará a un niño — son semanas de examenes y tengo que matarme estudiando estos días, porque una materia me está hinchando las pelotas — suspiro con cansancio — ¿Olvidaste los exámenes a caso?

— Oh — el castaño rio con vergüenza y rascó su nuca — no lo he olvidado... ¿Qué materia te está dando problemas? Puedo ayudarte si quieres.

— ¿Tu no tienes que estudiar? — pregunto con incredulidad.

— Bueno, la verdad es que no — rió un poco cohibido — solo tengo que leer mis apuntes el día anterior y ya.

El menor lo miro sorprendido y un poco molesto.

— ¿Eres muy bueno, o solo estudias para pasar? — preguntó.

— Siempre tengo el 90 por ciento del examen correcto, a veces es más — el castaño se sentía un poco avergonzado por la confesión.

— Hijo de puta — exclamó el menor con el ceño fruncido.

— Entonces, ¿Vas a querer que te ayude o no? — Kim estaba un poco incómodo.

— ¿Y quieres que te pague con mi cuerpo o una mierda así? — dijo cansado el menor — ya te dije que no podemos tener relaciones tan seguido.

— No es por eso.

— ¿Entonces? — cuestiono el menor.

No hubo respuesta del mayor y ambos se miraron fijamente por unos segundos.

— Gyuvin, no eres mi novio, no tienes por qué preocuparte por estas cosas, es innecesario — dijo suavemente el menor.

A pesar de que era algo que ambos sabían, se sentía incomodó decirlo y escuchar que no eran nada más que sexo.

— Lo sé — sonrió sin gracia — solo quiero compensar los malos ratos que te hice pasar en un principio.

— Oh bueno — exclamó — entonces lo acepto.