𝘋𝘦𝘮𝘰𝘯 𝘚𝘭𝘢𝘺𝘦𝘳 (𝙊𝙣𝙚 𝙎𝙝𝙤𝙩𝙨)

𝑳𝒂 𝑩𝒐𝒅𝒂 𝑫𝒆 𝑲𝒚𝒐𝒋𝒖𝒓𝒐 ~

SHIPS CONTENIDOS
(Akarenn, Giyuutan, Uzuzen)

― Mundo Sin Demonios ―

Un teléfono sonaba y sonaba por toda la casa sin ser contestado, pocos segundos después de que el teléfono volviera a sonar un pelinegro de ojos azules tomo el teléfono y contesto a la llamada, algo molesto por ser levantado de su gran siesta, esperaba que fuera una llamada bien y no para las estupideces de sus amigos.

― Bueno, quién habla? ―Habló aquel pelinegro, esperando respuesta del que se encontraba del otro lado de la pantalla―

Debido a que había contestado a la llamada medio dormido, no logró y ni le importaba leer el nombre de quien marcaba, prefería preguntar a leer, algo flojo de su parte

― ¿Tomioka? ―Preguntó la otra persona que se encontraba del otro lado de la pantalla, se escuchaba confundido, al principio el pelinegro no entendió muy bien aquella pregunta hasta que la otra persona volvió a hablar― Creí haberle marcado al Joven Kamado...―Habló algo desconcertado, ya que ahora se encontraba leyendo el nombre de la persona a la que le había marcado, pensando que se había equivocado de número―

― ¿Hah?, no, es mi teléf...―No termino de hablar ya que se había fijado que el teléfono que traía en manos no era el suyo, si no, el del pelirojo antes mencionado―

Suspiro ante la equivocación, aun así ya había contestado, no podía solo colgarle y quitarse el problema de encima

― Estoy seguro que el teléfono es de el Joven Kamado... ―Habló de nuevo la otra persona aun confundido, pues estaba más que seguro que le había marcado al pelirojo y no al pelinegro―

― ¿Qué necesitas Rengoku?, Tanjiro ahora esta dormido, tuvo una larga noche ―Habló ahora levantándose de la cama, sentándose en la orilla de esta―

El rubio se quedó pensando un poco y analizando, "¿Tanjiro y Tomioka durmiendo juntos?" Eso era raro, muuy raro o tal vez, lo estaba malinterpretetando...

― Oh, era solo para saber si vendrán ―Se escuchaba alegre y a la vez, muy cansado, tal vez por todo lo que estaba haciendo desde temprano, una boda no era simple―

El pelinegro acomodo sus cabellos y suspiro observando fijamente un bóxer, tal vez pensando si era suyo o era del pelirojo que dormía plácidamente en su cama, o tal vez, pensando en donde dejo las llaves de su auto, sacudió un poco su cabeza, alejando aquellos pensamientos y poder responderle al rubio

― Si, si iremos

― ¡Bien!, ¡nos vemos allá! ―Habló el rubio, y colgó la llamada, dejando al pelinegro con dudas y Hueva―

― ¿Quién...era? ―Se escucho la voz de un pelirojo somnoliento detrás del pelinegro―

El de ojos azules volteo, observando la hermosa vista, un bello pelirojo con sus cabellos desordenados, tallandose los ojos y envuelto entre las odiosas sábanas que no dejaban ver el hermoso y marcado cuerpo del menor.

― Rengoku, quería saber si iríamos hoy.. ―Habló el pelinegro―

El mayor se acercó al menor dandole un suave beso en los labios del pelirojo, aun que sus manos no se mantuvieron quietas, pues pasaron por la cintura del menor, acercándose a su pelirojo, saboreando los dulces y carnosos labios del menor.
Pocos segundos después, el de cabellos rojos se separo del beso, viéndolo con una radiante sonrisa―