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𝐒𝐄𝐂𝐑𝐄𝐓𝐎𝐒
Tres semanas.
Tres semanas y 3 casos había resuelto en conjunto de su equipo y cada vez se sentía más cómoda a su lado.
—¿Me darás tu respuesta?.-Elle se acercó a su lado con su típica sonrisa que le decía a Brianna que cumpliera con sus caprichos.—Casino, dos mujeres solteras. ¡Vamos! Será divertido vernos después del trabajo.
—Elle, acabamos de terminar un caso. Solo quiero ir a casa, ducharme y dormir.
—¿Por qué tan aburrida, Roberts? Creí que eras de California. Tenía mis expectativas altas en ti, muñeca.
La castaña rodó sus ojos ante ambos intentando persuadirla.
El moreno y la mujer estaban apoyados en su escritorio mientras que Spencer se acercó para dejar unos papeles que necesitaba que Brianna revisara.
—Niño bonito, ayúdanos a convencer a Bri para ir al casino.-le sonrió Morgan al castaño que se fijo en el lenguaje corporal de la castaña.
—Creo que hoy todos deberíamos descansar.
—¡Gracias! Spence. Alguien aquí con cordura.-el castaño se ruborizó levemente ante el hecho de que la nueva agente lo haya llamado "Spence".
Ambos no intercambiaban muchas palabras durante el día. Sólo trabajaban.
Brianna tenía mucha más relación con Morgan, Elle y Gideon que con el resto del equipo pero también había notado los intentos múltiples de la mayor al intentar sacarle conversación pero el siempre la evadía educadamente.
Spencer se volvía estúpido y vulnerable al lado de Brianna.
A Spencer no le gustaba ser estúpido y mucho menos vulnerable.
Pero no negaría que le gustaba mucho cuando ella lo miraba. Sobre todo, lo trataba como un compañero más y no lo molestaba como el resto.
—Agente Roberts necesito hablar con usted. Ahora.
—Ya terminaron mis horas, jefe.-la castaña tomó su maletín y le sonrió falsamente.—Nos vemos mañana.
—Es una orden.
—Hey, Hotch. Vamos estamos todos cansados.-intento intervenir Morgan pero fue inútil cuando el jefe se acercó a la castaña con enojo y dejó un documento en su escritorio.
Brianna observo el papel con curiosidad hasta que se dio cuenta de que se trataba.
