Will fue poseído por Vecna y, tras ser rescatado, su mente quedó alterada. Ahora intentan que recupere sus recuerdos, mientras Mike se esfuerza por traerlo de vuelta a quién era antes.
[PARALELO DE SITUACIÓN CON PEETA EN LOS JUEGOS DEL HAMBRE]
• Will fue poseído por Vecna y, tras ser rescatado, su mente quedó alterada. Ahora intentan que recupere sus recuerdos, mientras Mike se esfuerza por traerlo de vuelta a quién era antes •
Ambientada — en teoría— de la temporada 5, y después del apocalipsis, en línea con el canon. Las escenas se inspiran en "Sinsajo" de Suzanne Collins, específicamente en el secuestro de Peeta.
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Mike despertó en el suelo, desorientado por un agudo pitido en su oído. Parpadeó varias veces, tratando de enfocar su visión, pero todo seguía siendo una neblina confusa. Al llevar una mano a su oído, descubrió con horror que corría sangre de él. Había perdido por completo la capacidad de oír en uno de sus oídos.
Con un esfuerzo, se incorporó lentamente, luchando contra la sensación de vértigo que amenazaba con hacerlo desmayar de nuevo. Cuando finalmente logró enfocar su mirada, el lugar se hallaba inusualmente desprovisto de criaturas. Un escalofrío recorrió la espalda de Mike cuando se dio cuenta de lo que estaba pasando. Eleven. Ella era la única que podía espantarlos, la única que hacer algo así. Pero, ¿dónde estaba ella? ¿Y qué le había pasado a sus amigos?
Antes de poder reaccionar, su mirada se posó en otra figura cercana, a escasos metros de él. Su corazón se detuvo cuando vio a Will en el suelo, casi moribundo, con magulladuras que parecían imitar el aspecto de Vecna. Sin pensarlo dos veces, se arrastró hacia él, ignorando el dolor que arremetía contra su cuerpo.
—¡Will! .-gritó Mike, su voz llena de desesperación mientras lo levantó en sus brazos con cuidado, sintiendo el peso de su cuerpo débil y maltrecho.
— ¿Mike..? .- la voz de Will era apenas un susurro, sus ojos apenas abiertos.
— Si, si, soy Mike.- respondió, luchando contra las lágrimas que amenazaban con desbordarse. No quería preguntarle qué pasó, por que él ya lo había escuchado gritar suficiente para suponerlo.
— Mike..- susurró entre sollozos, su voz apenas un murmullo. — Ahora... le pertenezco a Henry.
Un nudo se formó en la garganta de Mike mientras escuchaba las palabras del chico. — No, Will, eso no es verdad.- dijo con firmeza, luchando por mantener la calma. — Estás a salvo ahora. Te sacaré de aquí.
Pero Will seguía llorando.— N-No puedo... no puedo escapar.- balbuceó, su voz temblorosa. — Él siempre me encontrará.. él no está muerto, no está muerto. V-Voy a morir con él.
Mike lo sostuvo con más fuerza, sintiendo la desesperación amenazar con abrumarlo.—Escúchame, Will. Estoy aquí contigo. Él no está aquí, no está aquí. - acariciaba la mejilla, tratando de transmitirle un sentido de seguridad.— Yo estoy aquí contigo.- insistió, sintiendo cómo el nudo en su garganta amenazaba con ahogarlo.
Pero Will seguía murmurando palabras incoherentes, sus ojos vidriosos mirando más allá de Mike, perdidos en algún lugar, mientras su corazón empezaba a dejar de latir. Desesperado, Mike lo atrajo más cerca.
