Un apocalipsis obsesivo [The Walking Dead]

Capitulo 3

Al despertar te encontraste completamente sola, no lo pensaste mucho pero si revisaste las afueras en busca de algún andador. Mientras te vestias encontraste un pequeño "trencito", sonreiste en grande, Shane sabía que esa era la marca de chocolate que más te gustaba y desde que llegaste a Estados Unidos no habías podido conseguirlos muy a menudo.

"¿Que paso?"

"Daryl, el hermano de Merle, se enteró de lo que le pasó, causó un alboroto y ahora partirán a buscarlo."

Silvaste sorprendida solo esperabas que le comunicaran al hombre que habías liberado a su hermano antes de irte, si no sería un desperdicio ir a buscarlo, lo más seguro era que Merle ya no estuviera en la ciudad. Te despediste de la familia Morales y te dirigiste hacia el Dixon, los Morales eran una familia con raíces latinoamericanas, con ellos podías hablar más cómodamente que con los demás, te hacían volver a tus raíces y modismos.

"¡Ya te dije que me importa una mierda! Iré de todas formas."

"Hasta donde yo se, no hemos hablado nunca."

Daryl Dixon volteo de inmediato al escuchar tu voz femenina, esperaba que quien se le acercaba era uno de los estúpidos que habían abandonado a su hermano. Le sorprendió verte parada con la espalda recta y el mentón en alto, se notaba que no te dejarías intimidar y no parecías ser una idiota altanera como Andrea.

"¿Que quieres?"

"Solo venía a consultar si te había dicho que tu hermano logró escapar de la azotea."

"¿Que?"

"Logre liberarlo de las esposas antes de irme..."

Procediste a contarle un poco de la huida grupal para ponerlo en contexto. Enfurecido golpeó el capo de la casa rodante y marchó hacia Glenn y los demás para posiblemente insultarlos y armar un nuevo plan, después de todo también irían a buscar la bolsa de armas que Rick había dejado atrás al caer del caballo. Cuando te enteraste de cómo Rick ingreso a la ciudad, te reiste de lo estupido que fue.

"Asi que se van ¿Están seguros de que no quieres que vaya?"

"Si, no quiero que te pongas en peligro y el campamento debe de tener a alguien que pueda cuidarlos."

"Bien, tengan cuidado."

Como de costumbre te despediste de tus amigos con un beso en la mejilla y una palmada en el antebrazo, una costumbre que, aún viviendo muchos años en EE. UU, seguía estando presente. Junto con los demás viste partir el vehículo hasta que se alejó lo suficiente como para no poder verlo muy bien.

Mientras que las demás lavaban la ropa o los trastes, a ti te dejaron asignada a los niños. Mantenias un ojo en ellos y otro en los alrededores, estaban sentados resolviendo ejercicios matemáticos, no ayudabas mucho pues tu fuerte siempre fue lenguaje y comunicación, los números no te iban muy bien. Los veías tan ajenos a toda esta situación que un temor se instaló en tu pecho, consultaste a Lori, Miranda y Carol si podías enseñarle un par de trucos para escalar en caso de verse rodeado de caminantes, la mujer de cabello gris fue un poco difícil de convencer pero tras explicarle tus títulos y experiencias acepto con la condición de no utilizar ninguna arma y que fuera luego de la hora de estudio.

Antes de que pudieras llevarte a los niños a practicar, Shane te secuestro junto con Carl para atrapar un par de ranas. Observaste a Carl tratando de atrapar alguna y reiste cuando cayó de lleno al agua.

"No te rías del pobre niño, apenas y esta comenzando."

"Lo sé, solo que me hizo recordar algo del pasado."

Walsh palmeó el suelo a su lado indicando que te sentaras a su lado, lo hiciste y platicaron un rato. La conversación paso de ser recuerdos divertidos a una conversación más atrevida, Shane te contaba sus experiencias con sus parejas anteriores pues había cosas que no lograba entender de las mujeres  y no pudiste evitar sentirte fuera de lugar al no saber ninguna de esas cosas. El hombre sintió tu estado de ánimo y pregunto al respecto, se sorprendió al enterarse de que nunca lo habías hecho.